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Una dirección con pleno poder 

Miquel Ezequiel será el director deportivo del Terrassa FC con responsabilidades sobre el primer equipo y el fútbol base, en el caso de que esta semana culminen las avanzadas negociaciones que mantienen las dos partes desde hace algunos días. Pese a que en un primer momento se buscaba un sustituto para las funciones que ha desarrollado Cristian García en las tres últimas temporadas, el perfil de Miquel Ezequiel ha llevado al club a apostar por él en una doble función que potenciará su figura en la estructura del club egarense.

Las conversaciones entre el presidente del Terrassa FC, Jordi Cuesta, y Miquel Ezequiel se desarrollan en una buena dirección y en una sintonía evidente. Aunque aún hay algunos asuntos a resolver, la intención de las dos partes es coindicente por lo que no parece que se vayan a producir inconvenientes insalvables. El consejo de administración quiere que el proceso culmine esta misma semana con el fin de empezar la labor de planificación del próximo ejercicio, un cometido al que se dedicaría Miquel Ezequiel de forma inmediata. Uno de los asuntos que debe resolver el técnico terrassense es su salida del EC Granollers, donde ejerce como segundo entrenador del primer equipo. No parece que se deban producir inconvenientes al respecto, a pesar de que el contrato que vinculaba a las dos partes se prorroga por un año más como consecuencia de haber acabado el campeonato entre los diez primeros clasificados. Una vez se resuelva la salida de Ezequiel del conjunto del Vallès Oriental se podría culminar de un modo definitivo su fichaje por el Terrassa FC.

De ese modo, quedarían descartadas otras opciones que el Terrassa FC tenía encima de la mesa, como la de José Delgado, actual secretario técnico del Prat.

Doble responsabilidad
El perfil de Miquel Ezequiel se ajusta a lo que estaba buscando el consejo de administración. Socio del Terrassa FC desde su nacimiento, ha trabajado en el club y en otras entidades tanto en el fútbol formativo como en la parcela profesional. En los últimos años ha estado vinculado a Sabadell, Manresa y Granollers, pero con anterioridad también ejerció como técnico en el Jabac, FC Barcelona, San Roque de Lepe y en el propio Terrassa. Tiene un profundo conocimiento de la estructura del fútbol profesional y conoce como pocos el mercado de jugadores jóvenes, una virtud que puede ser vital en la nueva etapa del club egarense.

Pero su larga trayectoria en el fútbol formativo ha llevado al Terrassa FC a ofrecerle una responsabilidad también sobre esa parcela. Aunque la estructura en la cantera está bastante definida a nivel técnico, su llegada permitiría contar con una figura que coordinase la política del Terrassa en el fomento de las categorías formativas, uno de los objetivos de futuro de los responsables de la entidad.

No hay que olvidar que el Terrassa entró en contacto con Miquel Ezequiel hace unos meses para abordar su incorporación al fútbol base. Los acontecimientos posteriores, que han derivado en la salida aún no anunciada de Cristian García, variaron el planteamiento inicial para ampliar sus competencias.

En todo caso, su primer cometido no será otro que construir una plantilla para el primer equipo en la que se presumen serios cambios. Únicamente Coro, Pallàs y Yaya tienen contrato en vigor y las nuevas directrices económicas pueden condicionar algunas de las decisiones a tomar.

Antes de ello, sin embargo, se deberá resolver el nombre de la persona que se sentará en el banquillo del primer equipo. Es sabido que la figura que genera más consenso es la de Nacho Castro, técnico del Horta a quien está a punto de clasificar para la promoción de ascenso. Aunque esa circunstancia también puede suponer un freno si supone un aplazamiento en cualquier decisión sobre el futuro del entrenador. Jose Solivelles y Xevi Molist también gustan.

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