Terrassa FC y CP San Cristóbal ya tienen la vista puesta más en la próxima temporada que en la actual. A cuatro jornadas para que concluya el campeonato, los dos equipos terrassenses de Tercera División viven en escenarios bien distintos pero con el denominador común de tener resuelto su futuro, para bien o para mal. En el Terrassa con un balance negativo tras fracasar en su propósito de obtener en el ascenso en la apuesta más ambiciosa de los últimos años y en el San Cristóbal con el rotundo éxito de haberse asegurado la permanencia con muchas semanas de antelación.
Por ello, los dos clubs se aprestan a tomar las primeras decisiones estratégicas de cara al próximo ejercicio y en ambos casos la figura del entrenador cobra una importancia capital. En esa dirección, los presidentes de Terrassa y San Cristóbal tienen previsto abordar la situación de forma inmediata con el fin de planificar con tiempo suficiente la confección de las respectivas plantillas.
En el caso del Terrassa FC, es probable que mañana viernes se produzca la esperada reunión entre el presidente, Jordi Cuesta, y el entrenador, Cristian García, para resolver la situación del técnico terrassense. Las dos partes se dieron de tiempo hasta después de Semana Santa y ahora ha llegado el momento de abordar el asunto. No se esperan grandes sorpresas después de una campaña decepcionante que no ha cubierto las expectativas depositadas en una plantilla que se potenció con el único objetivo de conseguir el ascenso. Ese mal balance deportivo se une a la incomodidad que ha tenido Cristian con una parte de la afición durante toda la temporada, lo que hace que todos los pronósticos apunten a una salida de Cristian al final del campeonato actual. No es descartable que el anuncio sea inminente.
Se abrirá entonces el capítulo destinado a la contratación de un sustituto. El club no sólo busca un entrenador, sino también un director deportivo. Y es probable que primero se resuelva la llegada de esa segunda figura para que sea él quien elija al nuevo entrenador. En todo caso, quien diseñe el Terrassa de la próxima temporada deberá tener en cuenta que el presupuesto sufrirá una reducción notable en relación a este ejercicio, lo que influirá también en el diseño de una plantilla en la que se podrían producir sensibles cambios, tanto por el coste de la misma como por el mal balance deportivo del año.
Ballabriga a la espera
En el San Cristóbal el escenario es bien distinto. El conjunto de Ca n’Anglada ha cerrado la campaña de su regreso a la Tercera División con un éxito rotundo y los responsables de la entidad apuestan por Oliver Ballabriga para dar continuidad a un proyecto que se ha instalado en los buenos resultados en los últimos tiempos. Y sobre esa base se planteará al entrenador una renovación de su compromiso.
Aunque las condiciones para cerrar un acuerdo en esa dirección parecen las adecuadas, no es menos cierto que Ballabriga quiere disponer de garantías a la hora de confeccionar una plantilla con posibilidades de repetir esta buena temporada. Ese será el principal caballo de batalla para cerrar la renovación, a expensas de que las dos partes se reúnan también en los próximos días. El entrenador del San Cristóbal dispone de algunas ofertas tentadoras tras su excelente trabajo en el club de Ca n’Anglada que pueden incidir en la decisión final.