Cristian García llegó el pasado domingo a los 50 partidos como entrenador de la primera plantilla del Terrassa FC, contabilizando los encuentros de Liga y promoción de ascenso. El técnico egarense ha alcanzado esa cifra en el momento más bajo de popularidad, después de encadenar dos derrotas consecutivas que han encendido la luz de alarma en un equipo diseñado para jugar la promoción de ascenso. El tropiezo ante el Europa en la última jornada y el mal juego de los egarenses provocaron las primeras señales de protesta, llegándose a pedir su dimisión por parte de un sector de los aficionados.
Pese a que la gestión de Cristian está siendo criticada en algunos sectores del terrassismo, el apoyo a su labor parece intacto en el club. El presidente, Jordi Cuesta, ha reiterado que "tenemos el mejor técnico" y que su confianza y apoyo es indiscutible. "Yo respeto la opinión de los aficionados que protestaron el domingo, que fueron una minoría, pero no comparto su opinión. Estamos en la octava jornada y no entiendo que la gente se pueda poner tan nerviosa. La críticas no pueden llegar tan pronto." Aunque Cuesta admite, como el entrenador, que "hemos tocado fondo" incide en que es prematuro pedir un relevo en el banquillo. "Se ha ganado un crédito. Ahora nadie se acuerda que con un equipo que no estaba entre los mejores nos llevó a una promoción de ascenso."
Cristian fue una apuesta personal de Jordi Cuesta para el banquillo del Terrassa. Tras un primer año como jugador y director deportivo, una lesión le decidió a dejar el fútbol. Y tomó el relevo de Agustín Vacas en el banquillo. Su llegada significó una bocanada de aire fresco, apostando por un fútbol moderno, ofensivo y de posesión del balón. Aunque el equipo tuvo altibajos, acabó jugando la promoción de ascenso, cayendo en la segunda eliminatoria tras una negra actuación en el campo del Compostela donde dejó escapar una ventaja de dos goles.
Esta temporada, Cristian García ha puesto en marcha el proyecto más ambicioso de los últimos años. Con una plantilla de primer nivel, su equipo ha sido catalogado como uno de los principales favoritos al ascenso. Pero, por el momento, ni los resultados ni el juego están cumpliendo esas expectativas.
Cristian García presenta un balance de 23 victorias, 16 empates y 11 derrotas en los 50 partidos que ha dirigido al conjunto egarense. Ha tenido a su equipo en once jornadas en posición de "play off", en seis oportunidades como cuarto clasificado, cuatro en la tercera posición y una vez segundo, la mejor clasificación que ha alcanzado. La peor fue la undécima plaza de la cuarta jornada de la temporada anterior. Aunque este año ha encadenado dos derrotas seguidas, su peor registro al respecto son 3 derrotas consecutivas la campaña pasada.
Su mejor episodio en el banquillo egarense lo vivió en el campo del Castelldefels, donde consiguió clasificar al Terrassa para la promoción de ascenso en un agónico partido. El peor, sin duda, la derrota por 3 a 0 en el campo del Compostela que le impidió jugar la tercera eliminatoria de la promoción de ascenso. En ese "play off" su equipo ganó tres de los cuatro partidos que disputó. Pero cayó en el que no tenía que hacerlo, después de una renta de 2 a 0 en la ida.