El San Cristóbal cerró la semana de tres compromisos ligueros con tres puntos más, después de superar en el Municipal de Ca n’Anglada al Figueres, gracias a un tanto de Kevin en la segunda mitad. El conjunto de Oliver Ballabriga, si bien no pudo completar un pleno, concluyó su semana grande con un cuantioso botín de siete puntos de los nueve posibles, conseguidos enfrentándose a algunos conjuntos mucho más bregados en la categoría y, en teoría, con más ralea.
Aplicando su fórmula de trabajo constante, compromiso sin tregua y muchas ganas, sin olvidar nunca que hay un balón que hay que saber tratar de una forma adecuada en cada momento, el equipo parroquial se ha inyectado muchas dosis de tranquilidad después de un comienzo poco esperanzador, que le había situado en la cola de la clasificación.
Ahora, los de Ballabriga ven el panorama desde un poco más lejos, situados en la novena plaza de la clasificación, pero sin olvidar que la función no ha hecho más que empezar. Todavía queda una eternidad y lo alcanzado ha de servir de estímulo, y para nada de acomodo.
Jugadores de banda
La primera mitad ante el conjunto ampurdanés deparó poco en el aspecto atacante por lo que al San Cristóbal se refiere. El Figueres dispuso de las mejores oportunidades, y se mostró más puesto, especialmente gracias a la insistencia de sus jugadores de banda, Iván Murillo, que lo intentaba por la derecha, y Espuña, que entraba por la izquierda con peligro.
Pronto, Dani Lledó tuvo que actuar con destreza para evitar las acciones ofensivas de los visitantes. El portero del San Cristóbal, muy atento, evitó opciones claras, como un tiro de rosca de Iván Murillo, un disparo de Espuña o un nuevo inteto de Iván Murillo. Las dos mejores llegadas, fueron casi seguidas, una en el minuto 24, con un tiro envenenado de Iván Murillo, que Dani Lledó despejó a córner, y un nuevo intento de este jugador, dos minutos más tarde, al plantarse en solitario ante el guardameta de los parroquiales, que salvó a su equipo de un gol que parecía cantado.
El resto de este primer tiempo fue de ligero dominio del Figueres, pero sin tantas aproximaciones al área local, aunque alguna hubo. La mejor opción para los de Ballabriga sería al filo del descanso, tras un saque de esquina ejecutado por Cabrera, y que Hassen cabeceó fuera por poco. Con empate a cero, se llegó al descanso.
Y en la segunda mitad, llegó la transformación del San Cristóbal. El conjunto egarense saltó al terreno de juego con otro talante y, pronto, creó sus primeras acciones de peligro, como un remate de cabeaz de Cristian después de un córner. En el minuto 13, además, se produjo el 1 a 0, en un contraataque conducido por Hassen, después de un saque de esquina sin consecuencias de los visitantes. El delantero sirvió a Kevin que, al entrar en el área del Figueres batió al portero Aroca.
El gol abrió un nuevo escenario, con el San Cristóbal crecido en su autoestima y el Figueres desconcertado, como si el guión previsto se hubiera partido en mil pedazos y no hubiera posibilidades de reparar el daño recibido. El conjunto de Ballabriga continuó sin bajar las armas pero, a dos minutos para la media hora de esta segunda parte, Hassen vio la segunda tarjeta amarilla por, según el árbitro, simular un penalti, lo que dejó a los terrassenses con diez jugadores, y mucho camino todavía por explorar.
Variación obligada
Ballabriga se vio obligado a variar el sistema, y dispuso dos líneas de cuatro, con Aitor como único hombre de ataque. Además, quiso dar solidez al centro del campo, y dio entrada a Joan Muntada, para apuntalar y guarecer esa zona del terreno de juego.
Se preveía que el control y el dominio del juego, hasta el pitido final, sería del Figueres, y así fue. Pero los de Joan Esteve no supieron sacar partido de su superioridad numérica. El conjunto ampurdanés batió y batió la pelota sin parar, por el centro del campo, pero sin apenas profundidad y no creó ninguna oportunidad clara de gol en lo que restaba de encuentro pese a que insitió en entrar por las bandas.
Al contrario de lo esperado, las mejores opciones para marcar hasta el final correspondieron a los de Ballabriga, que pudieron aumentar su renta. Primero fue Aitor, que tras un recorte disparó para que Aroca despejara a córner.
Poco después, Sergi Martínez, tras una gran acción personal, se inventó un pase perfecto para Víctor, que estuvo a punto de marcar, pero Aroca salvó con la punta de su bota. Prado, con un centro-chut, también anduvo cerca de marcar y Tom, ya en el tiempo añadido, tuvo el gol pero el portero lo evitó.
CP SAN CRISTÓBAL 1
UE FIGUERES 0
CP SAN CRISTÓBAL. Dani Lledó, Prado, Karim, Álex Alba, Cristian, Sergi Martínez, Aitor, Víctor, Hassen, Cabrera y Kevin. Chechú entró por Karim, en el minuto 64; Joan Muntada por Cabrera, en el 77; y Tom por Aitor, en el 86.
UE FIGUERES. Aroca, Puig, Dani Coll, Romero, Subi, Tena, Ritxi, Iván Murillo, Vilanova, Espuña y Álvaro. Valverde sustituyó a Espuña en el minuto 38; Torres a Tena, en el 55; y Pimentel a Iván Murillo, en el 68.
Árbitro. Edwar Miguel Gonzales Moreno. Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Hassen, Sergi Martínez y Álex Alba y a los visitantes Dani Coll y Romero. Expulsó por doble amonestación al local Hassen, en el minuto 73 de partido.
Gol. 1-0, minuto 58, Kevin.