Castelldefels es esta temporada la estación final de trayecto del Terrassa FC en la Liga. Los egarenses, del mismo modo que les ha sucedido en tres ocasiones en los últimos años, se juegan la clasificación para el "play off" en el último partido de la competición. Y en el banquillo contrario se encontrarán con un viejo conocido, quien fue entrenador terrassista Miki Carrillo. El técnico barcelonés ya vivió una jornada parecida en el Terrassa hace unos años, cuando su equipo se clasificó para la promoción en una agónica jornada final con triunfo en el último instante en el campo de un Cerdanyola que entrenaba su hermano Toni. Ahora vivirá una situación semejante aunque al otro lado del escenario. "No me gusta tener que afrontar este partido", admite quien sigue teniendo un excelente cartel entre la afición terrassista. "Tengo la mala suerte de que cada temporada me pasa algo parecido. No me gusta tener que jugar este partido, pero es lo que toca. Nosotros debemos dedicarnos a hacer nuestro partido y nada más."
Miki Carrillo debe guardar sus sentimientos y sus preferencias en esta oportunidad. "Yo no puedo entrar en el vestuario y decirle a mis jugadores que vamos a salir a perder. En todo caso, una Liga no se decide en un partido y quien se acabe clasificando será porque lo ha merecido a lo largo de toda la temporada. Pero es verdad que me produciría una sensación extraña ver al Terrassa fuera de la promoción perdiendo en Castelldefels." Miki Carrillo añade que después de tres derrotas seguidas, en su plantilla prevalece el deseo de firmar un buen final. "Lo que yo quiero es que gane el Castelldefels. El Terrassa tiene una mayor motivación y eso acostumbra a influir."
El combate final
En relación a la pugna entre Terrassa y Pobla de Mafumet por la cuarta posición, el ex entrenador del conjunto egarense considera que hay un abanico muy variado de opciones. "El que sea capaz de ganar va a tener muchas posibilidades", señala. "La Pobla tiene un partido muy complicado en el campo del Espanyol, un equipo que ha hecho una temporada increíble, que no ha perdido en casa y está a una semana de la promoción. La Pobla tiene la ventaja de depender de sí mismo, pero juega contra el campeón. Lo veo todo muy abierto."
Su equipo acabará quinto por la cola suceda lo que suceda en el partido del domingo contra el Terrassa. Y esa clasificación abre la ventana a una posibilidad de descenso compensado si son dos los equipos catalanes que bajan de Segunda "B" a Tercera. Llagostera y Olot son los implicados en esa situación, aunque los dos están fuera, ahora mismo, de las posiciones de descenso. "Hemos hecho una Liga de un nivel muy alto desde la jornada 10. Nos salvamos del descenso directo hace cinco jornadas y de la cuarta plaza por la cola hace tres. Pero hemos bajado en las últimas jornadas y eso no me gusta, porque mis equipos acostumbran a acabar muy bien. Me da rabia estar pendiente de lo que pase en Segunda "B" después de la temporada que hemos hecho, pero es lo que toca. Nuestro objetivo está cubierto, aunque ahora hay que esperar el tema de los descensos compensados. Yo confío en que no nos afecte porque veo difícil que bajen los dos, sería una catástrofe. Espero que el fútbol sea justo en este caso y uno de los dos se salve del descenso."
¿Primas?
Lo que no espera Miki Carrillo son primas de terceros equipos. Ni de la Pobla ni de un Prat que necesita que los dos primeros pierdan para aspirar a la cuarta posición. "Yo no he visto maletines nunca", señala. "En esta categoría el dinero no aflora demasiado. No creo que hayan premios extras."
Un tema en el que no quiere opinar es el referido a las quejas que su hermano, Toni Carrillo, expresó el domingo en relación al trato recibido por el Cerdanyola en el Camp Olímpic. "No debo opinar, porque no estuve allí", explica sobre lo expresado por el técnico del Cerdanyola. "Los finales de temporada son comprometidos, todo el mundo está nervioso pero yo nunca he visto ningún problema en el Camp Olímpic".
