Sergio Lobera ha finalizado su primera temporada en el Goa de la Superliga india, a quien ha clasificado para las semifinales de esta competición después de que el equipo fuese último el año anterior a las órdenes del mítico ex jugador brasileño Zico. Aunque el Goa disputa ahora la Supercopa, Lobera ha regresado a Terrassa con permiso de su club dado que su esposa se encuentra en avanzado estado de gestación y en pocas semanas serán padres de Sheila, la primera hija del matrimonio que nacerá en Terrassa. Después de su experiencia en el Mogreb Tetuán marroquí, el entrenador terrassense ya prepara su segundo año en el Goa con el propósito de mejorar su estreno.
Tercero en la Liga regular, semifinalista del "play off" por el título y con posibilidades de haber disputado la final del campeonato, todo ello en un equipo que venía de ser último. Imagino que sus expectativas y las del club han quedado cubiertas.
El resumen es ese. Y no sólo por los resultados, que es lo fundamental en el fútbol profesional, sino también por la forma de conseguirlos. Hemos sido fieles a una idea y a un estilo de juego que ha gustado mucho en el país, que ha tenido una gran repercusión mediática y que la afición de Goa se ha reconocido en esa manera de jugar. Conseguir esos resultados a través de esa idea ha hecho feliz a los aficionados.
¿Le quedó un cierto regusto amargo por no disputar la final?
Antes de empezar todo el mundo hubiese firmado llegar hasta donde hemos llegado. Pero yo soy muy exigente conmigo mismo y estar a un paso de quedar campeones siempre te deja una sensación rara. Pero no era el objetivo.
¿Le ha sorprendido lo que ha encontrado en India a nivel futbolístico?
Es magnífico cómo está organizado todo: los campos, las instalaciones, los protocolos establecidos antes y después de los partidos… Como organización es un ejemplo a seguir, se trata de una Liga muy seria y con muchos medios. Me ha sorprendido de forma muy positiva, aunque ya había adquirido mucha información previa y sabía dónde iba.
Vaya, que recomendaría a cualquier entrenador o futbolista español ese destino casi desconocido en España.
Lo recomendaría sin ninguna duda. Todos los jugadores que han venido están deseando quedarse allí, nadie se quiere marchar. Eso dice mucho de la Superliga india. Tanto a nivel profesional como personal es una experiencia recomendable.
¿Qué nivel futbolístico ha apreciado en la competición?
Existe un gran potencial en este país. Hay futbolistas indios de mucho nivel y les falta quitarse complejos para dar un paso adelante. No tienen mucho que envidiar a jugadores de otros países. Tienen futuro en el panorama internacional.
En la progresión del fútbol en el país juegan un papel importante los futbolistas extranjeros.
Sin duda. Aportan su experiencia en la elite internacional y su forma de entender el fútbol. Este año han jugado en India futbolistas como Berbatov o Robbie Keane, o con nosotros Ferran Corominas o Manu Lanzarote. Son una referencia y el papel que hacen es fundamental para el crecimiento del fútbol en el país, igual que los entrenadores.
Esta es su segunda experiencia profesional en el extranjero después de su etapa en Marruecos. ¿Qué le ha aportado todo ello a su formación como entrenador?
Te hace adaptarte a diferentes costumbres, diferentes mentalidades. Intentar sacar rendimiento de un colectivo con diferentes costumbres y mentalidades enriquece a un entrenador. Tienes que exigirte más, ser capaz de adaptarte a todo ello, incluso a costumbres de vida de cada persona. En España no tienes la necesidad de desarrollar eso para conseguir resultados.
¿Y en un grupo tan diverso le ha sido sencillo aplicar su modelo futbolístico?
En pretemporada estuvimos trabajando casi 25 días en la Manga del Mar Menor en unas instalaciones espectaculares. Fueron muchos días de convivencia y de trabajo intensivo en el que se consiguió que el equipo creyese en esa propuesta. Los jugadores que incorporamos tenían ya un perfil adecuado para aplicar esa idea.
¿La vida, a nivel personal, le ha sido sencilla en Goa?
Ha sido espectacular. Mi mujer ha pasado el embarazo allí hasta los 7 meses y todo ha ido genial porque se trata de una ciudad maravillosa, que te permite mucho ocio, con unas playas extraordinarias. Hemos estado muy a gusto, con gente muy amable y muy hospitalaria. Es una ciudad encantadora para vivir.
La próxima temporada tiene contrato en vigor con el Goa. Pero ¿qué planes de futuro tiene para más adelante?
Después de lo bien que han ido las cosas este año he tenido ofertas para salir de allí, pero este año ni me lo planteo. El club me ha tratado muy bien, he estado muy a gusto y ni he pensado en cambiar de aires. Después ya veremos qué sucede con mi futuro.
¿Le gustaría regresar al fútbol español?
No me obsesiona. Le puedo confesar que he tenido una oportunidad para hacerlo y no me lo he pensado. Lo importante es trabajar en buenos proyectos, independientemente del país. Estoy en una edad en la que me puedo permitir no mirar la comodidad y el mejor proyecto que se me pone encima de la mesa no está en España. Aunque en un futuro es evidente que es un tema que deberé valorar.
Entiendo que ha encontrado la felicidad personal en dos países donde igual pocos piensan que pueda encontrarse.
Quienes piensan que no la encontrarían es porque no lo han probado. Cuando lo hagan se darán cuenta de que el fútbol no tiene fronteras y que no se acaba en las cuatro paredes más cercanas. En otros países también está desarrollado e incluso la figura del entrenador es mucho más respetada. Los proyectos se hacen más de acuerdo con el entrenador y el éxito que puedas conseguir tiene mucha parte de tu trabajo más allá de entrenar de lunes a viernes. Y existen aspectos favorables desde el punto de vista económico, de estabilidad, de continuidad, de respeto a tu trabajo. Eso es muy importante a la hora de valorar y, a veces, en España no es fácil encontrarlo. Cuando has vivido las dos realidades puedes comparar y decidir. A veces existen prejuicios injustificados.
