Promover la implantación de Proliga en Catalunya era el principal propósito de la reunión que los clubs catalanes de fútbol de Segunda "B" y Tercera de esta asociación mantuvieron con el presidente del organismo, Óscar Garvín, en el Camp Olímpic de Terrassa. Proliga dispone de 330 asociados en todo el territorio español, pero en Catalunya únicamente cinco se han integrado en su estructura, entre ellos el Terrassa FC. Proliga reúne a los clubs de fútbol semiprofesionales de Segunda "B" y Tercera con el fin de mancomunar servicios y defender sus intereses de forma unitaria.
"La poca implantación en Catalunya ha sido un poco por culpa de todos", señala el presidente de Proliga, Óscar Garvín. "Somos un bebé como asociación pero ya con mucha fuerza y no nos ha dado tiempo de visitar a todo el mundo. Catalunya ha tenido una etapa convulsa en la que Proliga decidió esperar y pienso que ha llegado el momento de que los clubs de categoría semiprofesional den un paso adelante para poder hablar juntos en los despachos."
Garvín, que es el presidente del Atlético Pinto, señala que el principal reto de futuro que se marca Proliga es convertirse en Liga. "En eso estamos trabajando. El objetivo es cambiar la Ley del Deporte y que se ajuste al deporte semiprofesional. Queremos seguir los pasos que dio en su momento la Liga de Fútbol Profesional." Ese escenario tiene como propósito asumir la organización de las competiciones de Segunda "B" y Tercera. "La Federación Española siempre va a existir, es el gobierno de las competiciones. Pero la Liga semiprofesional de fútbol debe ser de los clubs. Y ellos los encargados de trazar un camino y una comercialización que son fundamentales para su crecimiento."
Retos
La aparición de esta agrupación de clubs semiprofesionales ha permitido, según su presidente, acabar con el desamparo que sufrían. "Éramos absorbidos por las federaciones, y los clubs deben tener independencia y capacidad de gestión en base a sus intereses. Yo espero que en el día de mañana los dirigentes de la Federación Española entiendan que Proliga no es negativo, sino positivo para el fútbol español."
Aunque la posibilidad de llevar a cabo una reestructuración de la Segunda División "B" es un tema debatido de forma reitirada aunque sin una propuesta firme, Garvín dice que hay otros temas más prioritarios para abordar en el fútbol semiprofesional. "Las categorías nacionales necesitan una reestructuración, eso es obvio. Pero hay que lograrla por consenso, no nos la puede marcar nadie. Pero tampoco creo que ahora sea el debate. La prioridad es trabajar para que la Ley del Deporte englobe la categoría semiprofesional, que los clubs entren en la Copa del Rey, que se negocien convenios colectivos. Hay muchas cosas importantes a solucionar antes."
Con la Federación Española en pleno proceso electoral, aunque interrumpido por decisión del Consejo Superior de Deportes, Proliga no se ha posicionado a favor de ninguna de las dos candidaturas existentes, las encabezadas por Luis Rubiales y Juan Luis Larrea. "No tenemos opinión. Lo que queremos es que entren gestores que de verdad regulen bien nuestro fútbol, que gobiernen y que entienan que deben dejar libertad a los clubs, a los sindicatos, a Proliga." En clave personal, Óscar Garvín sí se pronuncia con mayor claridad. "Entiendo que Rubiales no es la persona. Mi opinión es que debería acabarse esta legislatura como sea. Le queda un año y medio y a partir de ahí que se produzcan unas elecciones limpias de verdad en las que todos expresemos nuestra voluntad de forma libre. Creo que ese proceso electoral está manchado y ahora no soluciaría nada".