Punto y aparte. Hace diez años, Álvaro Fernández dejó a un lado el balón y buscó a través de lo que era su pasión, el básquet, otra perspectiva. La encontró. Sentado, buscando sonrisas entre los más pequeños que, por aquel entonces, deseaban ser como él. Fernández pasó de debutar en Primera Catalana con el verde del Sferic a buscar en un banquillo la pasión por un deporte que ya era su vida. Vueltas y más vueltas. Muchos colores, muchos sentimientos encontrados y, por encima de todo, mucha experiencia. Con 27 años, aquel joven que buscó otra mirada, otra perspectiva o simplemente otra pasión, ha cerrado el círculo.
Más de una década después, Álvaro Fernández volvió a sentarse en el banquillo derecho del pabellón de la calle Faraday. Volvió a dirigir un encuentro defendiendo los colores del Sferic. Y lo volvió a hacer, en el mismo lugar donde todo cambió: Primera Catalana.
Tras el paso al lado de Jose García Valverde, el Sferic se encontraba a media temporada sin entrenador, en la parte baja de la clasificación y con un horizonte un tanto preocupante. Por aquel entonces, Toni Cantón y Joan López, director técnico y presidente de la sección, respectívamente, pensaron en Álvaro Fernández como posible sustituto, y el joven técnico no se lo pensó. "Los dos principales valedores de mi regreso a casa son el presidente Joan López, y sobre todo, Toni Cantón. Ellos son los responsables de que hoy entrene al Sferic", explica Fernández.
Volver a casa siempre es especial
Nunca es fácil irte de casa. Y más si en esa casa, lo tienes todo. El técnico egarense reconoce que tras dejar el club hace más de diez años, han cambiado muchas cosas, pero que como no puede ser otra manera, siempre es especial volver al que un día fue su hogar "Me fuí hace mucho tiempo. Muchas cosas han cambiado, pese a que el pabellón sigue siendo el mismo. Toni fue mi primer entrenador, y siempre le tendré un especial aprecio al Sferic porque aquí es donde empecé y aprendí a jugar a baloncesto", comenta el técnico.
La vuelta de Fernández ha sido una bombona de oxígeno para el Sferic. Debutó esta semana con una contundente victoria ante un rival directo como el Ipsi. Pese a que la temporada, para él, va a ser muy corta, explica que lo más importante ahora es hacer crecer a un equipo que debe competir contra todo el mundo. "Es un reto importante coger un proyecto a mitad de temporada. El mayor objetivo es hacer crecer al equipo. Eso me hará crecer a mi como entrenador. Además, me lo tomo como un reto personal. Quiero demostrarme que estoy preparado. Pese a ello, lo más importante ahora es que el equipo mejore".
Dicha mejora ya se notó en el primer encuentro de su particular temporada. En él, el Sferic venció de forma clara, y pese al resultado, el técnico considera que, ahora, lo menos importante es, precisamente, el resultado. "En el primer partido tuve sensaciones fantásticas. La predisposición y compromiso del grupo fue ejemplar. Estamos en un momento en cual tenemos bajas, y por lo tanto estamos un poco mermados, pero la verdad es que llegar y que todo el mundo respondiera tan bien, que todo el mundo se implicara con el grupo y ser capaces de ser solidarios en todas las facetas del juego es algo muy positivo", explica.
Pese a partir de una situación muy diferente a la de otros equipos, el técnico considera que va a ser muy importante el trabajo semanal, ser muy constantes a la par que ambiciosos y centrarse, lógicamente, en crecer. "Son muy pocos partidos. El primer objetivo es hacer crecer al equipo, pero principalmente queremos hacerlo todos juntos. Desde el cuerpo técnico hasta los jugadores y teniendo siempre al club en el punto de mira. Queremos intentar tener un nivel competitivo alto las próximas semanas. Si hacemos todo esto, seguro que nos lleva a poder competir y luchar por la permanencia".
El objetivo es subir el nivel
Según Álvaro Fernández, el principal y casi único objetivo del Sferic lo que resta de temporada es abordar la permanencia y, si es posible, evitar la promoción.
Para ello, el técnico del conjunto verdiblanco quiere ir marcando poco a poco el camino. "Esta semana jugamos ante el líder, será otra prueba para nosotros y veremos cual es nuestro nivel y en qué punto nos encontramos. Pero más allá del resultado me quedo con el nivel del equipo durante la semana. Tenemos que seguir en esta línea e ir dando pasos hacia delante", asegura.
Unos pasos que terminarán al final de temporada. Una vez ahí, Fernández no ha querido plantearse el futuro y asegura que para él lo más importante es el siguiente partido. "De momento he venido aquí para dirigir estos 14 partidos e intentar ayudar al Sferic en todo lo que pueda. Cuando este ciclo, por así llamarlo, acabe ya veremos si al Sferic le interesa seguir contando conmigo y ya veremos que retos tengo yo personalmente", explica al respecto.
Las últimas semanas han sido un poco extrañas en la calle Faraday, pero Álvaro Fernández ha demostrado, pese a su corta edad, una madurez implacable, una tranquilidad inaudita y además, ha firmado un debut inmejorable. Fernández pues, tiene ante sí el mayor reto de su trayectoria como entrenador, pero lo que está claro, es que tiene las ideas altamente claras.