No recuerda cuantas ha disputado, pero son ya muchas. Muchísimas. Participó ya en la primera edición de la Pedalada Popular de Festa Major y lo hizo también el pasado sábado en la última, la trigésima. Cubrió los 10 kilómetros del recorrido en 1 hora y 4 minutos junto al resto de los 1.169 integrantes de un pelotón formado por ciclistas de todas las edades y condiciones. Se trata de Narcís Oller Anguila, nacido en pleno centro de Terrassa, en la calle Sant Pere, el día 21 de febrero del año 1930. En las últimas ediciones de la Pedalada se ha repartido el premio al ciclista más veterano con su compañero Àngel Cos Boada, a quien unas molestias impidieron participar en esta edición. Ambos son nacidos en el año 1930 y comparten la pasión por el ciclismo, un deporte que nunca han dejado de practicar.
Oller ha ganado el trofeo en las siete últimas ediciones, ya que es unos meses mayor que Cos. Y quiere seguir ganando año tras año esa pequeña competición entre ambos. “Si la muerte no nos separa seguiré corriendo muchas Pedaladas”, explica Oller, que pertenece al equipo Biter.cat, con quienes sale a pedalear de forma regular.
Recuerda todavía Oller la primera edición de la Pedalada en que participó. “Labòria me entregó un trofeo y nos prometió que harían un carril bici. Pero esa promesa se la acabó llevando el viento”, recuerda el ciclista terrassense.
A los 14 años le regalaron su primera bicicleta. “Siempre ha estado presente en mi vida. Antes hacía mucha carretera. Ahora, cuando hacemos salidas, evitamos en la medida de lo posible el asfalto. Es cada vez más peligroso”, señala el participante número 1.101, que se mueve a pie y en bicicleta.
Fotógrafo y joyero
Aunque el oficio de Narcís Oller fue el de joyero, ha ejercido también de fotógrafo profesional. Le encanta también la mecánica. Trabajó en un taller de coches. Ahora tiene un pequeño taller de bicis en casa, “donde arreglo las bicicletas de los compañeros”.
Por su apariencia física no aparenta los 87 años que tiene. Oller, además de ser el ciclista más veterano de la Pedalada, es todo un líder y un referente para sus compañeros de equipo. El sábado, mientras recogía de manos del alcalde Jordi Ballart su trofeo al participante más veterano de la prueba en el Parc de Vallparadís, recibió el enésimo aplauso por parte de compañeros y amigos.
La comitiva, menos numerosa que en ediciones precedentes, salió de la plaza Ricard Camí hacia el Parc de Vallparadís atravesando las diferentes avenidas y calles de la ciudad. Como es habitual, se realizaron varios controles de avituallamiento para que el grupo fuera siempre compacto. Al llegar al Pla del Castell, ciclistas de todas las edades buscaron las zonas de sombra para degustar el desayuno e hidratarse convenientemente.
La jornada se cerró con la correspondiente entrega de trofeos. Berta Muñoz y Manel Fernández, niños de meses, recogieron los premios a los participantes de menor edad. Entre los más veteranos, Narcís Oller y Montserrat Maldonado. Marta y Raquel competían en el galardón a las bicis más elegantes y mejor tuneadas. Ambos se los llevó Raquel. Para quienes no habían tenido bastante actividad, una clase de zumba puso fin a la fiesta.