En uno de los peores partidos de la temporada, la JE Terrassa Q Sport cayó en Can Jofresa en partido de la antepenúltima jornada por 8 puntos (41-49). Las egarenses notaron sobremanera las ausencias de las estadounidenses que se han marchado a su país. La última en hacerlo fue la pívot Catheryn Redmon. Las locales firmaron un partido deficiente, con pobrísimos porcentajes en el tiro (9 de 36 en tiros de 2 y 4 de 32 en los triples).
Precariedad anotadora
La precariadad anotadora y la falta de rebote y de contundencia condenaron al conjunto de Rafa Gutiérrez ante un Viladecans entrenado por el ex director técnico de la JET, un Jordi Justribó que ganó en su primera visita a Can Jofresa.
Tras esta derrota, la JET se ha situada antepenúltima y deberá pelear a muerte en las dos próximas jornadas para sumar el triunfo que necesita para evitar la última plaza y la consiguiente promoción de permanencia. Estará salvada si gana este domingo en casa al GEiEG o el próximo en la pista del Roser, con quien ha quedado empatada a cuatro victorias.
Las egarenses fueron siempre por detrás. Anotaron 5 puntos en el primer cuarto y 7 en el tercero. Sólo Silva, Diao y Arús mantenían a flote a un equipo al que no le salía nada y fallaba lo infallable. A falta de 11 minutos, las egarenses perdían por una máxima desventaja de 16 puntos (23-39). No lograron recuperarse en un último parcial en que tiraron de amor propio (16-10). El Unilever Viladecans les gana por una victoria de diferencia. En el bando visitante se alinearon las ex jugadoras de la JET Aida Nebot, Alba Lorca y Mónica Meca.
