El duelo entre Egara y Club de Campo fue extraordinario, con dos equipos para quienes el empate no era una opción. Los pupilos de Siso Ventalló demostraron una vez más que, pese a las numerosas variaciones operadas en el equipo, están firmando un arranque de temporada espectacular. Tras derrotar por la mínima (3-2) a los madrileños, el vigente campeón sigue en la segunda plaza. Suma ahora 16 puntos, tres más que el Júnior y un Atlètic que tiene todavía pendiente su partido ante el Barça. Cinco victorias, un empate y una derrota es el balance de un Egara que en esta séptima jornada demostró que no sólo sabe jugar bien y ganar sino también competir en los partidos "top". Lo hizo en la jornada anterior en el derbi y lo repitió, con triunfo, ante un Club de Campo que ofreció una buena imagen colectiva pero no pudo con un Egara bien ubicado sobre el campo, con las ideas claras y muy eficaz en la finalización.
Valga como detalle que Pau Quemada, que se echó el partido a la espalda cuando éste estaba en peligro de escaparse, transformó en gol dos de los tres penaltis de que dispuso su equipo, el último cuando el duelo agonizaba, a falta de menos de dos minutos para el final.
Fue el del domingo uno de esos duelos en que tienes el control, pero el rival te crea problemas al contragolpe y puede incluso ganarte. Pero el "savoir faire" de los de Ventalló lo impidió.
Quemada acabó resultando decisivo. Fue él quien abrió y cerró el marcador. A los doce minutos batió con un trallazo a la escuadra por primera vez a Borja Zumalacarregui en el primer penalti local. El gol dio sosiego a los del Pla del Bon Aire, que mandaron en el juego durante la mayor parte de los sesenta minutos y supieron apretar los dientes cuando convino.
Cortés, espectacular
Buena parte de culpa de que el Club de Campo no se llevara nada pese a su letal contragolpe la tuvo Quico Cortès, que cuajó una actuación mayúscula. Conscientes del peligro del "pichichi" Leandro Tolini en los penaltis, el Egara concedió sólo dos. El primero llegó justo antes del 1-0 y fue un amago que la defensa local no compró. En el segundo, Cortès detuvo el disparo raso del argentino. El 1-0 no era muy tranquilizador, pero se mantuvo hasta el descanso.
El tercer período fue el peor para el Egara, que vio como los de Roberto Gómez le daban la vuelta al marcador con dos goles en cuatro minutos. El delantero belga Mathew Cobbaert empató de revés en el minuto 45 y Ángel Álvarez-Labrador aprovechó un rechace de Cortès en el 49 para firmar un 1-2 que dejó estupefactos a todos.
Sin embargo, una de las grandes virtudes de este nuevo Egara es no bajar nunca los brazos. Y cuando expiraba ya el tercer acto, el capitán Guillem Fustagueras empató el partido con un buen chut cruzado que se coló bajo las guardas del meta visitante. Se abrió el último acto con las espadas en todo lo alto. Continuó el Egara siendo ambicioso, lo que le llevaba a desnudarse atrás y sufrir contragolpes peligrosos. Cuando las tablas parecían inevitables emergió la figura de Pau Quemada, que en su tercer penalti batió por bajo a Zumalacarregui y estableció el 3 a 2 definitivo. Dignísimo colofón para un auténtico partidazo de hockey.
CLUB EGARA 3
CLUB DE CAMPO 2
CLUB EGARA. Q. Cortès, P. Arch, R. Romeu, P. Novell, J. Farrés, P. Gispert, F. Dinarès, N. Usé, P. Quemada, E. Arbós y G. Fustagueras, equipo inicial, X. Aguilar, Q. Broto, M. García-Chicote, L. Mercadé y M. Espí.
CLUB DE CAMPO. B. Zumalacarregui, L. Tolini, B. Pérez-Pla, N. Cicileo, P. Marín, L. Rombouts, A. de Frutos, G. Lasso, M. Cobbaert, Q. González de Castejón y A. Álvarez-Labrador, equipo inicial, A. Iglesias, A. Negrete, I. Abajo, A. Tello y E. Zorita.
Árbitros. Marcelo Servetto y Narcís Carrió. Mostraron tarjeras amarillas al jugador local Pau Quemada y a los visitantes Bosco Pérez-Pla, Louis Rombouts y Mathew Cobbaert. Amarillas a los visitantes Bosco Pérez-Pla, Pablo Marín y Louis Rombouts.
Goles. 1-0, minuto 12, Pau Quemada, de penalti-córner; 1-1, minuto 45, Mathew Cobbaert; 1-2, minuto 49, Ángel Álvarez-Labrador; 2-2, minuto 51, Guillem Fustagueras; 3-2, minuto 68, Pau Quemada, de penalti-córner.