Pocas veces un empate fuera de casa ha dejado lesiones emocionales tan profundas como las del domingo en la Nova Creu Alta, escenario de ese derbi de signo menor que el Terrassa FC debe disputar estos últimos años contra el filial del Sabadell. Los egarenses tuvieron en su mano la posibilidad de golear al joven equipo arlequinado en la primera mitad, exuberante en cuanto a ocasiones de gol pero abundante en errores que acabaron penalizando al Terrassa de forma superlativa. El conjunto de Toni Rodríguez fue tan benevolente con su adversario que le permitió entrar en el partido en el segundo período, en el que el Sabadell "B" utilizó mejor las herramientas anímicas que aparecen en este tipo de partidos hasta que a un minuto del final se llevó el premio a su entusiasmo con un gol que convirtió ese empate en la peor de las derrotas de un Terrassa que prolonga su racha de más de nueve meses sin ganar fuera.
Y es que el comportamiento del Terrassa resultó bipolar, desconcertante en muchas fases del partido por la mala gestión que hizo del mismo ante un Sabadell "B" que resistió de forma milagrosa. Las diferencias entre unos y otros en el primer tiempo fueron gigantescas. El Terrassa, con la misma alineación de las dos últimas semanas e idéntico dibujo táctico, fue protagonista de todo lo que ocurrió en el primer tiempo. Hasta el 0-1, que se produjo en el minuto 27, monopolizó la posesión del balón aunque de forma poco productiva, penalizado por una visible falta de velocidad en sus acciones de ataque y escaso desequilibrio en la zona de definición.
Gol y asedio
Las apariciones constantes de Dani Pujol en la banda derecha se convirtieron en el mejor argumento ofensivo de los visitantes, hasta que en una de ellas se produjo el único tanto de los terrassistas. Un balón al segundo palo fue aprovechado por el lateral del Terrassa para rematar y enviar el balón al fondo del marco después de que éste tocase en un defensa.
Con el marcador a favor, el Terrassa dejó pasar su momento vital en este partido. Porque en poco más de un cuarto de hora generó seis situaciones de peligro en el área local que deberían haber sido suficientes no sólo para sentenciar el encuentro, sino para dar paso a una goleada incontestable.
El Sabadell "B" se vino abajo con el gol, su centro del campo se hundió y el Terrassa le arrinconó en su área con una facilidad aplastante. Àlex Fernández fue el primero en aparecer tras el 0 a 1, con dos remates al marco, el primero rechazado por Aguilar a córner y el segundo ligeramente desviado. Después fue Górriz quien no pudo aprovechar un balón largo que le dejó en una posición envidiable. Y más tarde David López cabeceó alto un córner también sin oposición. Górriz volvió a aparecer para rematar de cabeza muy forzado un buen servicio de Raúl Torres. Y a dos minutos del descanso, Raúl Torres estuvo a punto de anotar el 0 a 2 en una vaselina que un defensa sacó casi en la línea de gol.
Era tal la superioridad del Terrassa en el terreno de juego, a pesar de los errores en la definición, que los aficionados egarenses olían sangre en el descanso. Pero el fútbol se nutre de tantos tópicos que encierran realidades que al Terrassa se le aparecieron uno tras otro conforme fue avanzando la segunda mitad. Perdonó y dejó con vida al Sabadell "B" y el filial arlequinado resurgió en el segundo período. Ignasi Senabre, técnico del filial sabadellense, dio entrada a Juanpi y varió el dibujo de su centro del campo. Y el partido cambió de forma inesperada, alentado también por el entusiasmo de un Sabadell "B" que pareció entender mejor los factores emocionales que sacuden estos partidos. Los locales presentaron sus nuevos propósitos con tres jugadas de ataque de mérito en los diez primeros minutos del segundo tiempo: un disparo desviado de Max Marcet, el futbolista de más talento del Sabadell "B"; un remate por encima del travesaño de Ñito; y, sobre todo, un gran disparo de este último jugador en el minuto 55 que Ortega envió a córner en una espléndida intervención.
Cambio de guión
El Terrassa pareció haber caído en un exceso de confianza de esos de los que cuesta tanto recuperarse cuando intentas poner una marcha más. Los egarenses dejaron de tener el balón, tuvieron que preocuparse de lo que sucedía en su área y fiaron sus opciones ofensivas en los contragolpes. El balón volvió al área del Sabadell y primero Górriz, con un remate con el muslo que salió por encima del larguero, y después Guti, que había sustituido a Velillas, tuvieron el 0 a 2 en sus botas. En el minuto 65 fue Raúl Torres, en un remate a la media vuelta, quien obligó a Aguilar a lucirse.
Pero el partido ya no tenía un solo escenario, discurría en las dos áreas fruto de un cuerpo a cuerpo poco favorable al Terrassa. Juanpi protagonizó dos remates de cabeza de mucho peligro y Max obligó de nuevo a aparecer a Ortega de forma determinante. Toni Rodríguez dio entrada a Xapi Arnau en lugar de Górriz y rediseñó el equipo hacia un 4-2-3-1. El Terrassa llegó inquieto al final del partido, hasta que en el minuto 89 resultó castigado en grado extremo. Una falta lateral cerca del área fue enviada al segundo palo donde Sergio Montero, un joven futbolista de la cantera del Sabadell, le ganó la partida a todas las torres del Terrassa y marcó el tanto de la igualada. Aún tuvo el Terrassa dos oportunidades más, una con un disparo lejano de Àlex Fernández que detuvo el portero y otra en un contragolpe que Guti no supo armar en su fase final.
CE SABADELL "B" 1
TERRASSA FC 1
CE SABADELL "B". Aguilar, Diego, Adrián González, Gonzalo, Guillem Pujol, Ayrton Páez, Max, Lledó, Padilla, Ñito y Aliaga. Juanpi suplió a Ayrton en el minuto 46; Facu a Padilla en el 73; y Montero a Aliaga en el 85.
TERRASSA FC. Ortega, Dani Pujol, Amantini, Borges, David López, Àlex Fernández, Cristian, Velillas, Raúl Torres, Alberto Górriz y Raíllo. Guti suplió a Velillas en el minuto 54; y Xapi Arnau a Górriz en el 76.
ÁRBITRO. Sergi Carrero Romera. Amonestó a Adrián González, Aliaga y Àlex Fernández.
GOLES: 0-1, minuto 27, Dani Pujol; 1-1, minuto 89, Montero.
LOS DATOS
Doce partidos sin ganar fuera. El Terrassa FC sigue sin ganar un partido lejos de su estadio desde el 19 de diciembre de 2015 en que se impuso por 0 a 1 en el campo del Morell. Acumula doce partidos seguidos como visitante sin obtener los tres puntos, con un balance de siete derrotas y cinco empates.
Ambiente especial. Unos seiscientos espectadores se dieron cita en la Nova Creu Alta para presenciar un partido que contó con unos sesenta aficionados del Terrassa en la zona habilitada para ellos en una esquina del estadio, además de los que se acomodaron en tribuna.
Caras conocidas. Un partido de estas características concita mucha atención. Y en las gradas se vieroncaras conocidas. Jugadores que han defendido las dos camisetas, como Xevi Molist o entrenadores que se han sentado en los dos banquillos, como Miquel Olmo. También estuvo el entrenador del Sabadell, José Solivelles.