El día 18 de enero del año 1951, en plena postguerra, un grupo de jóvenes terrassenses decidieron crear en el centro de Terrassa un club deportivo, el Juvenil Club. Josep Amorós, Ernest Belles, Josep Maria Garrigó y Joan Sentis fueron los impulsores. Disponían de un equipo de fútbol y más tarde inauguraron una sección de gimnasia. Sus pretensiones iban más allá de lo puramente deportivo. Organizaban actividades culturales y sociales de diversa índole. Tenían su sede en la segunda planta del mítico y ya desaparecido Bar Colón, en la Plaça Vella. El pasado lunes, uno de los fundadores y miembro más activo del Juvenil club organizó cerca de allí, en la cafetería Viena de la calle Joan Corominas, un encuentro entre una veintena de ex socios de un club que sobrevivió durante 40 años, entre 1951 y 1991. Fue un día especial, ya que ese 18 de enero se cumplían exactamente 65 años de la fundación del Juvenil Club.
El Juvenil Club cesó sus actividades en el año 1991, pero en los últimos 25 años, a iniciativa de Fontanet, un grupo de socios se reúne todos los lunes para mantener viva de llama del que fue uno de los principales clubs amateurs de la ciudad de Terrassa. Primero lo hicieron en el Casino del Comerç y ahora lo hacen en el Viena.
Los habituales a estos encuentros semanales de tertulia y recuerdos son Josep Amorós, Jordi Ballester, Ernest Bellés, Francesc Bonell, Marc Boada, Rosendo Font, Joan Fontanet, Francesc Fornells, Joan Gibert, Domènec Gracia, Miquel Parera, Antoni Simó, Joan Vila, Josep Vila, Salvador Ycart, Enric Gibert, Francesc Donenec, Josep Orti, Ignasi Gauchola, Edmond Aymamí y Juli Puigantell.