El piloto matadeperense Nil Solans se clasificó en una meritoria decimocuarta posición dentro de la categoría RC2 en la edición número 51 del Rally RACC Catalunya – Costa Daurada. A bordo de su Peugeot 208 T 16 R5 de ACSM y con Miquel Ibáñez como copiloto, Solans no tuvo excesiva suerte en esta prueba. Tras ir incrementando paulatinamente su ritmo en la primera sección de la etapa inicial, la única con formato mixto de todo el Mundial, el matadeperense buscaba clasificarse entre los diez primeros de su categoría, la RC2, pero en la salida del sexto tramo una avería eléctrica -que se había iniciado ya en los compases iniciales de la etapa- impidió a Solans continuar su andadura en la prueba. Pese al infortunio, los mecánicos permitieron que el piloto pudiera reengancharse a la competición en los tramos de asfalto de Tarragona, donde se vio obligado a abandonar de nuevo. Solans inició el día con una penalización a causa de un problema técnico al partir de la asistencia. Supo mantener la concentración y se mantuvo entre los diez mejores de su categoría. Sin embargo, el piloto de la escuadra gallega no se encontraba del todo cómodo con el comportamiento del coche, que viraba en exceso y tenía problemas para entrar en las curvas.
Segundo abandono
Solans intentó afinar reglajes en la asistencia de mediodía de cara a los exigentes tramos vespertinos. Estuvo a punto de acabar hasta que un toque en una rueda durante la segunda sección del día le obligó a abandonar de nuevo en Salou.
Volvió a reengancharse al día siguiente y pudo disputar los seis últimos tramos del rally. Solans superó con éxito la última jornada y pudo finalizar en la decimocuarta posición dentro de su categoría, finalizando el 49 en la general absoluta de la prueba.
Por parte de la Escuderia Motor Terrassa, Lluís Costa y Maria Diomènech fueron primeros en la categoría RC5 a los mandos de su Suzuki Swift, mientras que Albert Marquina y Òscar Darder acabaron decimocuartos en la categoría RC4 con un Peugeot 208 VTI R2.
