Cuando acabó el último partido del Terrassa en la pasada Liga en el campo del Rubí, David Pirri sorprendió en la sala de prensa asegurando que su deseo era cumplir el segundo año de contrato que tenía acordado con el club egarense. Por entonces, la entidad estaba sumida en un profundo caos institucional que ponía en duda su propia continuidad. Lejos de tirarse del barco, el técnico de Badia dijo que su ilusión era seguir en el banquillo de un club histórico como el Terrassa. Ahora, con una realidad más estable y un nuevo proyecto preparado para echar a andar, David Pirri ha sido el elegido por el nuevo presidente, Jordi Cuesta, no sólo para dirigir el primer equipo sino también para ejercer como director deportivo en la cantera del club egarense. El acuerdo entre las dos partes es total desde hace algunos días, pero falta la oficialización del mismo y la firma del contrato que está pendiente de pequeños detalles. Pirri contará con el mismo equipo de colaboradores de la temporada pasada. Juanje será su segundo entrenador, Xavi Pérez el preparador físico y Tomás Pastor el entrenador de porteros.
"Dije que me quería quedar porque lo sentía", explica David Pirri. "El Terrassa es un gigante dormido y hay que zarandearlo para que se despierte. Me hace muy feliz que hayan pensado en mí para eso." Pirri, que seguirá formando equipo con Sergio Montero como secretario técnico, firmará un contrato de larga duración (se habla de tres o cuatro años) con el fin de desarrollar un proyecto a medio plazo. "El proyecto de Jordi Cuesta me ha transmitido mucha ilusión. No tienen ninguna prisa, quieren crecer poniendo unos buenos cimientos, haciendo las cosas con criterio y profesionalizando las distintas áreas. Me gusta el proyecto y somos ambiciosos para conseguir buenos resultados."
Pirri ha hablado en los últimos meses con todos aquellos que han optado a conseguir la propiedad del Terrassa. Lo ha hecho con Cuesta, también lo hizo con Wospac e incluso con Eduardo Posada. "Mi prioridad ha sido el Terrassa. He tenido otras propuestas, pero no me han convencido. Yo quería seguir en Catalunya y todos los números pasaban por hacerlo en el Terrassa. Por eso escuché a todos los que aspiraban a comprar el club, en primer lugar porque yo tenía un compromiso por dos años."
A trabajar
El lunes está previsto que empiece a entrenar el conjunto egarense, con las limitaciones propias de una planificación lastrada por el desarrollo de la crisis del club. Hay trabajo por hacer en la confección del equipo, desmantelado casi en su totalidad en relación al año anterior. Pirri deberá formar una plantilla en la que predominará la juventud y durante la pretemporada contará con algunos futbolistas a prueba a los que evaluará en ese período. "A mí me hubiese gustado contar con todos los jugadores que teníamos. Con algunos ajustes era un grupo capacitado para aspirar a todo y teníamos mucho camino recorrido en cuanto a la concepción de nuestra idea de juego. Pero hay que volver a empezar y vamos a trabajar para conseguir buenos resultados." Pirri señala que hay camino hecho en la incorporación de futbolistas. "Sabemos que el presupuesto va a ser reducido por el coste económico de la compra del club. Pero nos vamos a adaptar igual que lo hicimos el año pasado. Pienso que podremos hacer un equipo competitivo."
En esta nueva etapa va a desarrollar una doble función de entrenador y director deportivo. Un cargo al estilo británico, según dicen los responsables del área deportiva del Terrassa. "En el Sabadell ya hice esos dos trabajos y no hubo ningún problema. Se trata de implantar una metodología de trabajo, de entrenamiento y de juego. Eso requiere tiempo y paciencia".