Eduardo Posada, ex presidente del Terrassa FC e impulsor de la plataforma que propugnaba la transformación de la sociedad anónima en un club social, presentó ayer en el registro municipal un documento dirigido al alcalde, Jordi Ballart, en el que detallaba los pasos dados por su grupo. El mismo mantuvo una reunión el martes por la noche para abordar las actuaciones a llevar a cabo y formar una junta gestora que asumiese la dirección del club, propósitos que quedaron en entredicho al conocerse el acuerdo entre Jesús Fernández y Jordi Cuesta para la venta de la sociedad anónima.
La carta presentada por Posada detalla los acuerdos alcanzados en la asamblea del 1 de julio y señala que existía un acuerdo con Jesús Fernández para la cesión de los derechos federativos. La carta añade que el propósito del grupo era crear un club social que optaría a la gestión del Camp Olímpic para dedicarlo a la formación de un fútbol base sin ánimo de lucro. El grupo detalla en la carta que la creación de un club social “daría el retorno de la entidad a la masa social de la ciudad, por lo que mucha gente lleva tiempo luchando y esperando”. El grupo de Posada considera que esa sería la forma más viable de “evitar las malas gestiones privadas que hemos vivido en los últimos años” y devolvería la seriedad y seguridad en la gestión “además del acercamiento de más aficionados del Terrassa FC”. La declaración de intenciones destaca la importancia del trabajo de la cantera y con los clubs de la ciudad.
“Queríamos que el Ayuntamiento supiese lo que estábamos haciendo, independientemente de la sorpresa de conocer que está ya todo vendido”, explicó Posada. “No queremos interferir en ningún acuerdo, sino simplemente informar de nuestra actuación.” La carta presentada ayer en el Ayuntamiento estuvo firmada por las siguientes personas: Eduardo Posada, Kiko Sánchez, Pepe Sánchez, Miquel Bertran, Lluís Roca, Domingo Rodríguez, Pepo Tost, Jordi Batalla, Salvador Bayona, Jaume Tost, Daniel Vinuesa, Josep Manel Gómez, Celestino Jaime, Fanny Sallès, Ángel Montoya, Carles Mota, Guillermo López, Sergio Fernández, José Martínez y Joaquín Blázquez.
Los componentes de ese grupo aportaron también ayer al alcalde un documento firmado por Jesús Fernández en el mes de abril en el que cedía los derechos federativos del Terrassa FC al Futbol Base Terrassa “por la imposibilidad de seguir gestionando y afrontar las obligaciones correspondientes por falta de recursos económicos suficientes como consecuencia de la disminución de ingresos”, señala el documento.
“Me sorprende cada día lo que pasa en este club”, dijo Eduardo Posada. “Con Jesús Fernández existía un acuerdo para la cesión de los derechos federativos. Pero aquí cada día pasa algo. Hay poca seriedad y mucha irresponsabilidad. Es impresentable lo que pasa, y me refiero a las dos partes.” En ese sentido, Posada entiende que la actuación de Cuesta no ha sido la adecuada. “Se le invitó a un acercamiento y no ha contestado nuestras llamadas. Por lo que veo todo el mundo busca el estadio para hacer negocio. Podríamos haber colaborado todos.”
Posada añade que esperaba otra actitud de Cuesta. “No me gustó su proceder. Hay que tenerle un respeto a una asamblea a la que vinieron nás de cien personas. Ellos lo han hecho todo en secreto. No se puede jugar así con el club que lleva el nombre de la ciudad.”
En todo caso, Posada celebra la solución de la crisis. “Pienso que nuestra aparición ha sido clave. Se vio que el club está vivo aunque algunos lo querían enterrar. Pensaban que nadie iba a decir nada y que el club se iba a morir. Al observar el movimiento social cambiaron de proceder y están copiando nuestras soluciones. Si es para bien, tendrán nuestro apoyo”.