La inacabable crisis institucional del Terrassa FC parece encarar la recta final. El empresario Jordi Cuesta firmó el miércoles ante notario la operación de compra de la sociedad anónima Terrassa Olímpica 2010, propiedad de Jesús Fernández y poseedora de los derechos federativos del Terrassa FC. Y Cuesta presentó posteriormente su proyecto al alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, en un encuentro que ambos mantuvieron en el Ayuntamiento, acompañados del concejal de Deportes, Alfredo Vega, y del directivo del equipo de Cuesta, Serafí Gázquez. La operación, por tanto, estaría finiquitada, la crisis cerrada y el futuro de la entidad garantizado. Pero la disparatada historia del Terrassa FC de los últimos meses no podía concluir de forma tan plácida y el capítulo final aún no se ha escrito, después de que Wospac, que recientemente anunció su renuncia a la compra de la sociedad anónima y su acuerdo de colaboración con el grupo de Cuesta, desvelase ayer que mantiene el derecho preferencial de compra al que no renunciará hasta que firme su acuerdo con Jordi Cuesta.
Primeros pasos
La operación entre Jordi Cuesta y Jesús Fernández se gestó la semana pasada y ayer pasó su último trámite en el notario. Antes, componentes del equipo de Cuesta trasladaron a la Federació Catalana su libro de ruta y su predisposición a asumir las deudas pendientes, tanto con este organismo como con la plantilla, a quien se les deben las últimas mensualidades de la campaña anterior. Jordi Cuesta asume la deuda de la sociedad anónima (ahora se habla de una cantidad aproximada de 150.000 euros en contra de los 450.000 que dijo Wospac que constaban en su auditoría) y sustenta un proyecto deportivo con un primer equipo en Tercera División, un filial en Primera Catalana (función que asume el Terrassa FC 1906, nueva denominación de la Peña San Pedro) y la gestión del fútbol base. Sergio Montero sería el secretario técnico, con David Pirri en la dirección técnica de la primera plantilla y José Luis Duque en el segundo equipo.
El desenlace de la operación, desvelado en primicia por Diari de Terrassa, ha supuesto una sorpresa generalizada por inesperado. Jordi Cuesta había manifestado en distintas oportunidades su negativa a adquirir la sociedad anónima por el volumen de la deuda de la misma y por las implicaciones futuras que podían recaer en sus gestores por una mala administración. En base a ese planteamiento, impulsó la creación del Terrassa FC 1906 bajo el paraguas de la Peña San Pedro, que ha desaparecido como tal. Sin embargo, esta postura cambió en los últimos días de forma inesperada. Las razones las explicó ayer Jordi Cuesta a la salida de su reunión con el alcalde. “Siempre hemos dicho que no queríamos comprar. ¿Qué nos ha hecho cambiar? En primer lugar un gesto de buena fe de Jesús Fernández, que ha liquidado una deuda muy importante vendiendo sus propiedades. Y han aparecido nuevos mecanismos que nos blindan ante posibles responsabilidades futuras. Además, viendo que habían otros proyectos para el club hemos dado un paso adelante. Todos esos condicionantes nos han empujado a la compra. Si no la hacíamos podíamos perder este tren de forma definitiva.” Cuesta admitió algunos errores propios en el proceso. “Igual habíamos matado antes de tiempo al Terrassa.”
La aparición de la plataforma impulsada por el ex presidente Eduardo Posada, que quería asumir la gestión de la sociedad anónima y transformarla en un club social que mantuviese las señas históricas del Terrassa FC, ha sido clave dado que el proyecto de Cuesta hubiese quedado seriamente lastrado en ese escenario. Ni su identidad hubiese sido la del Terrassa FC ni la utilización del Camp Olímpica hubiese estado garantizada. “Nuestro proyecto no excluye a nadie”, explicó Cuesta. “Damos cabida a todo el mundo y si Posada quiere dirigirse a nosotros lo escucharemos, igual que a todos los clubs de la ciudad.”
El equipo de Cuesta quiere empezar a trabajar cuanto antes en la vertiente deportiva. El calendario de actuación en ese sentido apremia, hay que realizar la inscripción federativa, pagar las deudas y formar una plantilla. “Hemos perdido a muchos jugadores y mucho tiempo. Hay que ponerse a trabajar de inmediato”, dijo.
Estructura técnica
En ese sentido, las líneas fundamentales de actuación están trazadas. Bajo la dirección de Sergio Montero en la secretaría técnica, David Pirri sería el entrenador del primer equipo. Existe un acuerdo verbal con él, según dijo Cuesta, pendiente de que quede reflejado en un contrato. El segundo equipo estaría bajo la dirección de José Luis Duque, el entrenador que llevó a Primera Catalana a la Peña San Pedro. Su estructura estará basada en la juventud, con futbolistas que tengan posibilidades de acceder a la primera plantilla. “Nos sabe muy mal el tiempo que hemos perdido”, dijo Cuesta. “Queremos hablar con alguno de los jugadores que se han marchado por si existe alguna posibilidad de recuperarlos.”
A nivel estructural, el equipo de Jordi Cuesta mantendrá la fórmula de una sociedad anónima mientras que el Terrassa FC 1906 seguiría siendo un club social.