Acaba de cumplir 36 años y lleva más de 13 siendo el mejor jugador de pádel del mundo. Hace dos semanas, Fernando Belasteguín fue la estrella invitada en el acto oficial de inauguración de la nueva pista panorámica del Atlètic. "Bela" posee el récord de imbatibilidad en este deporte, con 1 año y 9 meses, ganando 22 torneos consecutivos. El "Messi" del pádel habló para Diari de Terrassa del pasado, el presente y el futuro de este deporte, el segundo con más licencias tanto en Catalunya como en España, sólo superado por el fútbol.
¿Qué tal fue la experiencia de compartir unos "tie-breaks" con los socios del Atlètic?
Fenomenal. La gente se lo pasa muy bien en este tipo de eventos. Esto es precisamente lo bueno que tiene el pádel. Tengas el nivel que tengas puedes disfrutar en la pista.
Usted lleva trece años siendo el mejor del mundo, algo muy poco habitual en otros deportes.
Es algo de lo que por ahora no me doy cuenta, pero estoy seguro de que cuando deje de jugar lo voy a disfrutar de forma diferente. Cuando llegue el momento de retirarme será el momento de mirar hacia atrás. Ahora estoy concentrado en todas las cosas que debo mejorar.
A diferencia de muchos otros jugadores, usted no procede del tenis.
No. Yo vengo del fútbol. Comencé a jugar a pádel muy jovencito y desde entonces se dio todo muy rápido. Comencé a jugar a los 9 años y con 15 era ya jugador profesional de pádel. Hace 21 años que vivo del pádel y estoy realmente encantado.
Igual que en Argentina, aquí en Terrassa el hockey y el pádel son deportes muy practicados. ¿Este club le recuerda al suyo?
Sí. Existen ciertas similitudes. Este club, por ejemplo, me recuerda lo que fue en Argentina el "boom" del pádel entre 1990 y 1992. Pero a diferencia de Argentina, aquí el pádel se está manejando como un deporte. Allí fue más un negocio, una moda rápida. Aquí los clubs han ido introduciendo el pádel poco a poco. Se está realizando un crecimiento contínuo y sostenido en el tiempo. Eso es lo más importante para que no se quede en una moda y se convierta en un deporte realmente consolidado.
En Argentina el pádel está viviendo una fase de declive.
En Argentina se está jugando en los clubs que han quedado. Si la crisis económica afectó al fútbol, imagínese a todos los otros deportes. Tuvieron que cerrar casi todos los clubs, pero los que aguantaron el chaparrón ahora tienen una gran cantidad de horas ocupadas.
¿Los mejores jugadores siguen estando en Argentina?
Yo diría que los tres países donde existe un mejor nivel de jugadores son Argentina, España y Brasil. Es donde el nivel es más alto.
Aquí en Terrassa se juega a una modalidad llamada pádbol, una mezcla de pádel y fútbol?
Me lo han nombrado, pero no he tenido la oportunidad de practicarlo. Pero como me gusta el deporte y comencé jugando a fútbol, seguro que si juego me lo paso bien.
¿Qué retos le quedan por cumplir?
Nos quedan doce torneos más por disputar del calendario del 2015 más el Máster. Pero mi gran reto es seguir mejorando. Sé que tengo un gran margen de mejora en muchos aspectos técnicos y estoy trabajando para conseguirlo.
¿En qué debe mejorar el mejor del mundo?
Trabajo mucho la parte ofensiva y el contragolpe. Sigo jugando a pádel con las mismas ganas que cuando debuté como profesional con 15. Intento aprender cada día. Tengo mucho margen de mejora.
¿Tan bueno es usted que nadie ha podido superarle en trece años?
Hay jugadores muy buenos, pero trato siempre de ponérselo lo más difícil posible. Al estar tanto tiempo de número uno, la gente cree que el pádel es un deporte fácil.
El pádel es el segundo deporte con más practicantes en España, pero no tiene un gran seguimiento mediático. ¿A qué lo achaca?
El pádel profesional va muy por detrás del amateur. Sigue siendo un deporte muy nuevo, muy joven, que necesita crecer y aprender.
¿Piensa en la retirada?
Acabo de cumplir 36 años y espero jugar hasta los 40. Me quedan todavía muchas cosas por hacer en el pádel y mi ilusión está intacta.
