El Viladecavalls perdió la eliminatoria de ascenso a Tercera Catalana que se disputó a lo largo del pasado fin de semana ante el Samà de Vilanova. El conjunto de Viladecavalls tenía ante sí una prueba de fuego que se decidiría a doble partido y con el factor campo a favor, porque el partido de vuelta se jugó en Viladecavalls.
En el primer partido, que se disputó el sábado en Vilanova i la Geltrú, el CB Samà controló el tempo del partido porque casi siempre fue por delante en el marcador. Aún así, el buen juego del Viladecavalls evitó que las diferencias fueran amplias, sólo con pequeñas ventajas para el cuadro local de entre tres y seis puntos durante la mayor parte del encuentro. Se llegó a un final ajustado y, entonces, dos decisiones arbitrales rodeadas por la polémica, en forma de dos técnicas señaladas al banquillo del Viladecavalls, beneficiaron a un Samà que consolidó su renta en el marcador, rubricada y ampliada con un triple que dejó el 82-71.
En el partido de vuelta, disputado el domingo, el Viladecavalls saltó a la pista con la misión de remontar dicha diferencia en contra. Parecía que la remontada era posible, porque fue por delante en el marcador. Redujo la diferencia a seis puntos, pero cuando parecía estar cerca de igualar la eliminatoria, los nervios jugaron en su contra, situación que el Samà, con más veteranía y acciones poco deportivas, no desaprovechó. Los de Vilanova pusieron la directa y voltearon el marcador para tomar la iniciativa. Hubo polémica por la actitud de los jugadores visitantes, pero la realidad es que en el marcador los jugadores del Samà marcaron la diferencia para dinamitar el partido y sentenciar la serie obteniendo una ventaja a su favor que resultó ser definitiva (45-75).
