"Llegué a la entidad con 18 años, como "dansaire" del Esbart Egarenc, y en ella sigo, a punto de cumplir los 80", señalaba ayer a este diario Felip Elósegui, "Socialero de l’any" 2019. El premio con que el Centre Cultural el Social distingue cada año, en la cena de fin de temporada, un socio destacado especialmente por su dedicación en general a la entidad, fue entregado el viernes a uno de los más antiguos, y de los que, seguro, más horas le han dedicado. En esos 62 años de "socialero", Felip Elósegui (Terrassa, 1939) ha bailado con el Esbart Egarenc y ha sido su presidente, luego entró en la junta y fue vicepresidente y, entre 2005 y 2017,su presidente (y desde entonces, presidente emérito). Elósegui es la persona que más tiempo -doce años – ha estado al frente de la entidad de la calle de la Font Vella.
De ahí que la entrega del "Socialero de l’any" constituyera un pequeño gran acto de homenaje a su figura, y a lo mucho que ha dado al Social. Se mostró emocionado al recibir el premio, "que no me esperaba. Ni siquiera se me había pasado por la cabeza. Me ha hecho mucha ilusión, por supuesto". El premio está dotado, además de con una cena, con la gratuidad en todas las funciones e iniciativas del Social durante un año, y también las partidas de la "Gresca" final del quinto, "en el que, no he jugado nunca. Ni siquiera sé jugar".
Partidas gratis de la "gresca"
El socio "amb més empenta" fue Gemma Vall, integrante del Social Teatre y de la colla sardanista de la entidad, Amunt i Avall. Y el socio "més trempat", la joven Júlia Roca, también miembro del Social Teatre, y además del Esbart Egarenc. Ambos galardones están desde siempre dotados con una cena, pero este año tenían, ambos, un regalo sorpresa: al igual que el "Socialero", todas las partidas gratuitas en la "Gresca" que cierra la temporada de juego del quinto.
"El sopar del Social", tan animado como cada año, reunió unas 150 personas en la pista de la entidad, en una noche de temperatura veraniega. Contó con la actuación, como músico, cantante y animador en general, de Jordi Gómez.
