El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha explicado hoy que, cuando ayer dijo en Berlín que había que pasar página al 1 de octubre en Cataluña, lo que quería decir es que “hay que acabar con la unilateralidad”.
“La unilateralidad es a la que hay que pasar página”, ha respondido Sánchez al portavoz de ERC, Joan Tardá, después de que éste le acusara de “dinamitar” la vía de diálogo sobre el problema de Cataluña cuando aseguró ayer en Berlín que lo que representó el 1 de octubre “es una página que hay que pasar”.
El presidente le ha recordado que el referéndum ilegal del 1 de octubre fue consecuencia de lo que pasó en el parlamento catalán el 6 y el 7 de septiembre, cuando “una mayoría parlamentaria representante de una minoría social impuso sus reglas y quebró unilateralmente la Constitución y el Estatuto de Autonomía”.
“Por eso cuando hablo de pasar página hablo de acabar con la vía unilateral”, ha reiterado, durante su comparecencia ante el pleno del Congreso para informar del Consejo de Europeo.
Sánchez ha subrayado también que no considera que la Constitución represente unos “márgenes estrechos” para dialogar y encontrar una solución, sino que, al contrario, cree que es “el punto base para construir un nuevo consenso que de respuesta a la crisis en Cataluña”.
A cinco días para su reunión con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, Sánchez ha asegurado que acudirá a ese encuentro dispuesto a “dialogar” y a “establecer dinámicas cooperativas” y ha dicho que le “gustaría encontrar esa misma actitud” en el Govern.
Tras defender que en las últimas semanas, desde que él es presidente, el “nivel de confrontación se ha visto distendido”, ha apostado por continuar en esa línea, al tiempo que se ha mostrado consciente de que el problema de Cataluña no se va a “arreglar esta legislatura”.
Sánchez ha tranquilizado además a Tardá respecto a que Cs -al que se ha referido como “un grupo minoritario”- no va a contar con el apoyo del PSOE para “quitar voz a la minoría” con su iniciativa de fijar un mínimo del 3 % de los votos nacionales para obtener representación parlamentaria en el Congreso.