Distintos colectivos feministas en Cataluña han expresado indignación y rabia ante la decisión de la Audiencia Provincial de Navarra de poner en libertad provisional bajo fianza a los cinco integrantes de La Manada, y han denunciado que esta decisión transmite un mensaje de “impunidad”.
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Navarra ha decretado hoy la prisión provisional bajo fianza de 6.000 euros para los cinco integrantes de La Manada, condenados por un delito de abusos sexuales con prevalimiento en los Sanfermines de 2016.
El auto, que ya ha sido notificado a los condenados, ha contado con un voto particular discrepante del presidente del tribunal, José Francisco Cobo, quien ha abogado por la prórroga de la prisión provisional sin condiciones.
La secretaria de mujeres y políticas LGTBI de CCOO Cataluña, Alba García, ha criticado en declaraciones a Efe que “tan sólo unos días antes del inicio de los Sanfermines, la decisión parece una provocación”, y ha añadido que los integrantes del grupo “han sido juzgados y condenados y tienen que cumplir”.
García ha informado de que CCOO se ha sumado a las movilizaciones convocadas en distintas ciudades españolas, entre las cuales Barcelona, “generadas por la indignación y por un sistema que cada vez se ve que es más injusto”.
“No es la primera vez que pasa, pero con esta sentencia se están evidenciando algunos de los problemas del sistema judicial, que no está preparado ni formado para juzgar este tipo de casos”, ha criticado García, para quien “hay que adaptar el sistema a las necesidades reales de hoy en día”.
Desde el colectivo Novembre feminista de Ca la dona han explicado a Efe que están “cabreadísimas” por esta decisión, y que “hay que cambiar esta justicia patriarcal, que no defiende nunca los intereses de las mujeres y acaba de dejar en libertad a cinco violadores”.
“Lucharemos hasta el final para acabar contra esta injusticia no sólo hacia la mujer afectada sino contra el conjunto de las mujeres, y esperamos un posicionamiento claro por parte del nuevo gobierno” de Pedro Sánchez, han afirmado.
La abogada penalista y experta en género Carla Vall ha tuiteado que la decisión judicial “lanza un mensaje poderosísimo a dos bandas: a los agresores, impunidad, y a las víctimas, desprotección”, y ha denunciado: “A las víctimas no se nos puede exigir seguir al pie de la letra las reglas del juego cuando el sistema blinda la impunidad”.
La ilustradora Paula Bonet ha expresado vía Twitter que “no son sólo 5 violadores los que andan sueltos. Estamos rodeadas de ellos. Están en casa, en las aulas, sentados en el autobús, en las cenas de empresa, recitando poemas sobre una tarima. Están en todos los putos sitios. Por favor, salid todas a las calles”.
La diputada en el Parlament por En Comú Podem Elisenda Alamany ha calificado en la red social de “indignante” la puesta en libertad de los condenados y ha pedido “políticas públicas que hagan caer la venda machista de los ojos de la justicia patriarcal”.