El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, considera que el Gobierno, ante una eventual declaración de independencia unilateral del Parlament, debería aplicar el artículo 155 enfocado a garantizar “seguridad y urnas” porque -ha afirmado- “lo prudente ahora es actuar y lo imprudente es no hacerlo”.
En una entrevista en el programa Converses de COPE-Catalunya, ha afirmado que ayer volvió a plantearle al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, una “hoja de ruta democrática” que garantice los derechos de los catalanes, la seguridad y una vía para dirimir en las urnas una “salida democrática” a la crisis política en Cataluña.
“Lo prudente ahora es actuar, lo imprudente es dejar de actuar”, ha dicho Rivera, quien pide a Rajoy que sea consciente de que “no nos jugamos sólo una parte del territorio español, sino que siete millones de catalanes sufran una fractura social para una generación”. “Y está pasando -añade- todos tenemos grupos de whatsapp”.
Por ello cree que unas elecciones en Cataluña permitirán también “un nuevo interlocutor”, ya que da por hecho que Puigdemont no sería president, además de “cambiar el relato” y “no estar pendientes todo el día de lo que quieren los independentistas”.
Rivera, cree que es mejor que los partidos constitucionalistas den “pasos adelante” y no “esperar a que se pudra la situación, que se proclame la independencia y esperar casi una semana” a que se active el mecanismo del 155″.
Ha puntualizado que el 155 es un artículo “copiado” de una Constitución federal como la alemana y que él no lo plantea ni quiere que se haga “para poner a alguien por dos años” al frente de la Generalitat, sino “para garantizar la seguridad en las calles de Cataluña y dar voz a los catalanes”.
“Es mucho más inteligente dar la voz a los catalanes que dar la voz a un delegado del Gobierno del PP”, ha opinado Rivera, para quien es muy importante ganar “la batalla del relato” porque -ha dicho- “me duele en el alma que los demócratas que respetamos la ley y no acosamos a nadie parezca que tenemos que pedir perdón”.
Además, ha opinado que convocar elecciones supone “dar la vuelta como un calcetín” al discurso independentista, ya que, se ha preguntado, “¿quién puede oponerse a unas elecciones?”.