El 112 ha informado a los ciudadanos de las localidades madrileñas de Griñón, Humanes y Moraleja de Enmedio de que ya no es necesario que permanezcan en sus viviendas tras haberse disipado la nube tóxica originada por el incendio de 40 toneladas de virutas de magnesio y aluminio en un polígono industrial de Fuenlabrada.
Según informa Emergencias Comunidad de Madrid 112, la situación es óptima, por lo que no es necesario que los vecinos deban seguir confinados en sus casas dos horas más.
Las mediciones del aire que ha realizado la Consejería de Medio Ambiente en las estaciones fijas registran valores dentro de la normalidad, por lo que “no existe ningún tipo de riesgo para la población”.
Sin embargo, una unidad móvil de medición se desplazará hasta el lugar para seguir analizando la calidad del aire.
La nube tóxica se ha originado por el incendio de 40 toneladas de virutas de magnesio y aluminio y ha sido en torno alas 9.20 horas cuando se ha iniciado el fuego en el exterior de una nave del polígono La Vega 2, ubicado en la calle Sierra de Cazorla de Fuenlabrada.
Por causas que se investigan, arden 40 toneladas de virutas de magnesio y aluminio, en un incendio cuya propagación han evitado los Bomberos, que siguen trabajando en la zona, donde ya queda poca carga de fuego.
Ahora están removiendo con maquinaria pesada y un poco de agua el material quemado, al que no ha sido necesario echar sal de fundición.
En el suceso ha ardido un camión y un contenedor, pero el fuego no ha afectado a la nave ni a otros colindantes en una zona donde hay varios polígonos industriales, que han sido desalojados, así como el hotel Ciudad de Fuenlabrada, a la vez que se ha cortado al tráfico la carretera M-506.
Los sanitarios del Summa han tenido que evacuar a un herido con quemaduras con pronóstico reservado.
En el lugar trabajan doce dotaciones de Bomberos de la Comunidad de Madrid y cuatro de Fuenlabrada, que han pedido la colaboración de los primeros ante envergadura del suceso.
Madrid 112 envió un aviso masivo por la aplicación My112 y teléfonos fijos a los vecinos de Griñón, Humanes y Moraleja de Enmedio para que permanecieran en sus casas, ya que la nube tóxica se desplazaba hacia allí, si bien ahora ha desaparecido.
