El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha dicho hoy que en las próximas semanas hará “un último intento” de pedir al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, diálogo para acordar un referéndum, aunque ha avanzado que el Govern lo hará igualmente si la respuesta es negativa.
En un almuerzo organizado por la entidad Sobirania i Justícia, Puigdemont ha subrayado que la agenda del Govern solo tiene el referéndum en su “cara A y en la B”, por lo que ha descartado “la posibilidad de que se convoquen elecciones autonómicas anticipadas”.
El presidente catalán ha indicado que el Gobierno está a tiempo de “apuntarse a la alineación de los jugadores de la solución”, por lo que ha avanzado que la Generalitat impulsará un “último intento” de acordar el referéndum con el Ejecutivo del PP.
Esta petición de diálogo, cuyo formato “aún no está decidido”, irá acompañada del “ingente trabajo” del Pacto Nacional por el Referéndum, que el próximo 19 de mayo celebrará un acto para hacer balance del trabajo que ha llevado a cabo en la búsqueda de apoyos dentro y fuera de Cataluña por una consulta acordada.
En todo caso, en esta petición “volveremos a decir a Madrid que podemos hablar de la fecha, de la pregunta, de las mayorías o de la implantación de resultados”, ha afirmado Puigdemont.
El presidente catalán ha indicado que si se quiere negociar se debe “poder hablar de todo”, sin que ninguna de las dos partes, ha dicho, renuncie a sus respectivos principios, al tiempo que ha lamentado que de momento el Gobierno central se haya “borrado de la lista de la solución y solo está en la lista de los problemas”.
“Esperaremos expectantes la respuesta”, ha añadido Puigdemont, que ha avanzado que, en el caso de que la respuesta de Moncloa sea negativa y no quiera “hablar de todo sin límites y sin condiciones”, entonces el Govern pasará a “la segunda parte”, que será preparar igualmente el referéndum, aunque sea con la oposición del Gobierno central.
El presidente catalán no ha querido hablar de la fecha ni de la pregunta del referéndum -previsto para el otoño-, para dar la “oportunidad” al Gobierno central de hacer propuestas en este sentido, ni tampoco ha querido entrar en una supuesta declaración unilateral de independencia, porque “no está en la agenda de trabajo”. “Trabajamos en la agenda de referéndum o referéndum”, ha subrayado.
En caso de independencia, Puigdemont ha considerado que el Estado deberá pagar “sí o sí” lo que deba a Cataluña.