La presidenta del Congreso, Ana Pastor, apartará de forma inmediata de su escaño al todavía portavoz del PDeCAT, Francesc Homs, en cuanto reciba el auto de ejecutoria de la sentencia dictada por el Tribunal Supremo y que le condena a trece meses de inhabilitación para ejercer cargo público.
Fuentes parlamentarias han explicado que la sentencia del Tribunal Supremo llegó la semana pasada al Congreso, aunque junto a ella no se incluía la ejecutoria con las instrucciones para aplicarla.
Pastor pidió entonces aclaraciones al Supremo, que ha anunciado que dictará en las próximas horas ese auto de ejecución reclamado por el Congreso, una vez que ha tenido constancia de que la condena ha sido notificada ya formalmente al interesado.
La presidenta del Congreso aseguró ayer a los periodistas que está “a la espera” de lo que ordene el Tribunal Supremo. “Tenemos que recibir el auto de ejecutoria”, dijo Pastor, que pudo hablar con Homs de su situación en los últimos días.
Coincide con la opinión de Pastor la vicepresidenta cuarta del Congreso, la diputada de Podemos Gloria Elizo, que comparte el criterio jurídico del Congreso de no apartar a Homs de su escaño hasta que no se reciba ese auto de ejecución. “Es un requisito formal indispensable”, añadió.
Por su parte, la socialista Micaela Navarro aseguró que su partido está ahora preocupado por cuestiones más importantes que por el futuro de Homs, más allá del “aprecio personal” que se pueda sentir por él. “Tendrá que pasar lo que diga la ley que pase”, zanjó.
En cuanto la presidenta del Congreso reciba esa ejecutoria se la comunicará a Homs, al secretario general del Congreso y a la Junta Electoral Central (JEC), a efectos de designar un diputado que le sustituya.
Homs, que recibió ayer martes formalmente la notificación de la sentencia en su despacho del Congreso de manos de una secretaria del Tribunal Supremo, acudió con normalidad a la Junta de Portavoces y al pleno de la Cámara, a la espera de que el Congreso aplique la condena y le aparte del escaño.
En los pasillos del Congreso, el propio Homs criritcó que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, haga “propaganda” y “promesas a la desesperada” en Cataluña al anunciar un paquete de inversiones, mientras a él le van a “echar” del Parlamento “simplemente por haber puesto las urnas”.
Homs reiteró que se les está persiguiendo por sus ideas, aunque algunos quieran jugar al “avestruz” y hacer ver que se trata de una cuestión jurídica por desobedecer al Tribunal Constitucional, y ha repetido que tiene la conciencia tranquila y que lo volvería a hacer.
Y así, “con toda la tranquilidad y serenidad del mundo”, aseguró que afronta el que podría ser su último pleno y ha subrayado que se trata de una “cuestión de formalidades” y que, por tanto, ejercerá su responsabilidad como diputado “hasta el último minuto”.
El portavoz del PDeCATrecibió en el Congreso la solidaridad de partidos como ERC, el PNV o En Podem Comú.
Joan Tardá, de ERC, denunció ayer la “vergüenza” que, a su juicio, va a vivir el Parlamento español por “expulsar a un representante del pueblo de Cataluña que cometió el pecado de permitir que 2,3 millones de personas participaran en un proceso de movilización democrática que no tenía efectos jurídicos”.
Desde el PNV, Aitor Esteban lamentó la situación de Homs y criticó que el Congreso concediera en su día el suplicatorio, pese a que, en su opinión, era una causa política. Confía eso sí, que el Congreso tenga “sentido común” y se le permita despedirse de la Cámara.
Xavier Domenech, de En Comú Podem, consideró que la condena de inhabilitación al portavoz del PDeCAT “no es justa” y que debería poder seguir en su escaño.