El Ayuntamiento de Badalona acatará mañana la resolución de un juzgado barcelonés contra su voluntad de permitir que los trabajadores municipales canjearan el festivo Día de la Hispanidad por el 9 de diciembre, pero los ediles acudirán a las puertas del consistorio para atender a ciudadanos.
El juzgado contencioso-administrativo número 14 de Barcelona ha dictado una medida cautelar contra el consistorio después de que la Delegación del Gobierno en Cataluña interpusiera ayer un recurso al respecto.
“En ningún caso queríamos ni queremos poner a ningún trabajador municipal en una situación complicada”, ha apuntado el primer teniente de alcalde y alcalde accidental, Oriol Lladó, en rueda de prensa.
Lladó ha sostenido que la propuesta que se puso sobre la mesa no respondía solamente a motivaciones políticas, sino que se trataba de una iniciativa consensuada con los sindicatos en pro de la conciliación de la vida familiar con la laboral.
“Tiene que quedar claro que estamos frente a un golpe de Estado a la autonomía local”, ha lamentado el tercer teniente de alcalde, José Téllez, que ha recalcado que se trataba de una opción “voluntaria”.
Téllez ha criticado la “dureza” con la que el Estado ha actuado en relación con la propuesta badalonesa, pero ha avisado de que no desestabilizará al gobierno que encabeza Dolors Sabater (Guanyem Badalona en Comú), que se halla de viaje.
En el plano político, los dos ediles han insistido en que hay muchos ciudadanos que consideran que el Día de la Hispanidad “no hay nada que celebrar”, ya que conmemora la conquista de América y, por extensión, el “genocidio cultural” que se perpetró contra los indígenas locales.
Esta misma mañana, el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, ha considerado una “aberración” propia de “ignorantes” e “indigentes culturales” definir de este modo la efeméride.
“Le recomiendo una lectura, ‘Las venas abiertas de América Latina’, de Eduardo Galeano, que no sé si a él le parecerá también un indigente cultural”, le ha rebatido Téllez.
Lladó ha ironizado con que basta con “ir a la biblioteca” o “abrir cualquier libro de historia” para constatar que lo que se produjo tras el descubrimiento del continente americano fue un genocidio.
Según datos del consistorio, el 10 % de los trabajadores que podían canjear de forma voluntaria la fiesta del Día de la Hispanidad por el 9 de diciembre habían solicitado acogerse a esta posibilidad.