El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha anunciado hoy su intenció de convocar un referéndum sobre la independencia de Cataluña, con o sin el aval del Estado, para la segunda quincena de septiembre y ha subrayado que no hay más alternativa para culminar el proceso: "O referéndum o referéndum".
Durante casi una hora, Puigdemont ha intervenido ante el hemiciclo del Parlament, en la primera jornada del debate de la cuestión de confianza, antes de que mañana los grupos parlamentarios se pronuncien en una votación en la que el president tiene a priori garantizada su victoria, con el apoyo de los 62 diputados de Junts pel Sí (JxSí) y los 10 de la CUP.
Puigdemont ha defendido el "referéndum acordado" con el Estado como la solución idónea y ha mostrado toda su "disposición a colaborar lealmente con un Gobierno español que quiera colaborar lealmente con un gobierno catalán" que tiene intención de convocar un referéndum sobre la independencia de Cataluña.
Si hay un Gobierno en España dispuesto a sentarse a hablar, ha garantizado su predisposición a negociar los detalles de esta consulta: la pregunta, la fecha, los quórums necesarios para considerarla válida y la moratoria hasta un nuevo referéndum.
Pero ha dejado claro que, si bien su mano tendida para acordar un referéndum con el Estado "no caduca", tampoco "paraliza" el proceso soberanista y ha subrayado que a finales de julio de 2017 el Parlament ya habrá aprobado las estructuras de Estado básicas y Cataluña estará "preparada para poderse desconectar con plenas garantías" del Estado.
"Perseguiremos el acuerdo hasta el último día", ha asegurado Puigdemont, "pero, si llegamos al final de la legislatura y no ha habido respuesta positiva" por parte del Estado, "estaremos preparados y a punto para subir el último escalón antes de proclamar de manera efectiva la independencia".
El plan de Puigdemont pasa por encargar al vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, para ultimar la "arquitectura" de este referéndum, que debe organizar el departamento que lidera el conseller de Asuntos Exteriores, Relaciones Institucionales y Transparencia, Raül Romeva.