La Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) acogerá este curso 3.500 alumnos y 400 docentes e investigadores en el nuevo campus Diagonal-Besòs, que ha sido inaugurado hoy por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
La nueva zona universitaria de la UPC -situada entre la zona Fórum de Barcelona y el barrio de La Mina, de Sant Adrià de Besòs- se centrará en los estudios de ingeniería industrial, que hasta ahora se cursaban en la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Industrial de Barcelona, en la calle Urgell de la capital catalana.
En el campus, se impartirán siete grados universitarios de ingeniería biomédica, eléctrica, electrónica industrial y automática, mecánica, energía, química y de materiales, además de otros siete estudios de posgrado, y albergará a 28 grupos de investigación y unidades transversales de investigación.
En las obras se han invertido 97,5 millones de euros, financiados con 19,7 millones de la Generalitat de Catalunya, 23 millones de la Diputación de Barcelona, 5,8 millones del Consorcio Escuela Industrial de Barcelona, 15,7 millones de la UPC y con aportaciones de fondos europeos y el Gobierno central.
El complejo empezó a edificarse en diciembre de 2009 y estaba previsto que comenzaran a impartirse estudios en 2012, pero la construcción se vio ralentizada a causa de los recortes presupuestarios.
Se han levantado tres edificios de 53.000 metros cuadrados de una superficie potencial para edificar de 150.000 metros cuadrados. Una de las construcciones pendientes es una residencia para universitarios.
En el acto inaugural, Puigdemont ha afirmado que el nuevo campus es “un orgullo del país” y la “única gran infraestructura universitaria construida en Catalunya en los últimos años”.
El president ha dicho que las instalaciones de la UPC en el Besòs representan una “nueva centralidad basada en el conocimiento, la docencia, la tecnología y en una sociedad comprometida”.
“Será un polo de atracción de inversiones y conocimiento que beneficiará al país y a una zona necesitada”, ha añadido.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha asegurado que el campus se halla “en una de las zonas más pobladas de Catalunya y, a la vez, de las que más pobreza y olvido han acumulado”, por lo que ha señalado que “ha llegado el momento de dar al Besòs la centralidad que se merece y se convierta en un eje central de la ciudad”.
El alcalde de Sant Adrià, Joan Callau, ha indicado que se trata de un “día especial, emocionante e histórico” para su municipio, y que con la llegada de la UPC “se rompen barreras y muros invisibles”. “Es un factor estratégico para cambiar el paradigma que asocia a Sant Adrià con la crónica negra a otro de excelencia”, ha agregado.
El rector de la UPC, Enric Fossas, ha recordado que la zona universitaria del Besòs ha sido “un proyecto difícil y complejo, iniciado en tiempos de prosperidad y desarrollado en tiempo de crisis”.
Fossa ha explicado que “se ha tenido que renegociar para hacerlo posible y ha generado conflicto dentro de la universidad y con las instituciones, pero se ha demostrado que hemos sido capaces de cumplir con los compromisos adquiridos”.
Al acto inaugural, también han asistido el conseller de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, Jordi Baiget; la presidenta de la Diputación de Barcelona, Mercè Conesa; la alcaldesa de Badalona, Dolors Sabater, y la presidenta del Consorcio del Campus Diagonal-Besòs y teniente de alcalde de Barcelona, Janet Sanz, entre otros.
