El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha calificado de “dramático” y “terrible” el incendio que asola parte de los términos municipales de Xàbia y Benitatxell, sobre todo después de que un cambio de viento tras el mediodía haya empeorado la situación.
Tras visitar el puesto de mando avanzado (PMA) en Xàbia junto al director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias de la Generalitat, José María Ángel, ha informado de que, aunque a primera hora las previsiones fueran más optimistas, el cambio del viento ha reavivado las llamas en el paraje natural protegido de La Granadella.
En esta zona en su vertiente más cercana a la urbanización Mirador de las Cumbres del Sol es donde trabajan ahora mismo una veintena de medios aéreos de la Generalitat, Diputación y Gobierno central.
Puig ha destacado que las condiciones climáticas favorecen a las llamas, con vientos cambiantes que superan los 30 kilómetros por hora, más de 30 grados y una humedad relativa por debajo del 20 por ciento.
A esto se añade, ha relatado el president, el “extraordinario combustible” que hay en este paraje de La Granadella por la prolongada sequía y la cantidad de barrancos de difícil acceso.
Ha destacado la respuesta de los ciudadanos de Xàbia y de la comarca alicantina de la Marina Alta para atender a los desalojados, así como la dedicación del resto de administraciones para la lucha contra el fuego, especialmente a la Diputación Provincial y a la Unidad Militar de Emergencias (UME), que se han unido a la Generalitat.
Ha insistido en que “todas las evidencias” apuntan a un pirómano como autor material del fuego y ha señalado que no se trata de un incendio más sino que afecta a un suelo de alto valor y también de uso residencial por lo que se ha puesto en riesgo las vidas de muchas personas.
“Tengo que contenerme en adjetivos ante este nuevo terrorismo medioambiental que va más allá de poner en riesgo el patrimonio natural porque también lo hace contra las personas”, ha subrayado.