Catalunya registró ayer récords de temperaturas máximas en 58 de las 135 estaciones meteorológicas que tienen más de diez años de registros y, en algunos casos, como en Vic (Barcelona), donde los termómetros subieron por encima de los 37 grados, el calor superó la máxima tomada en 1937.
En general, Cataluña no registraba un día de septiembre tan cálido desde 1950, hace ya más de 66 años.
Según ha informado el Servicio Meteorológico de Catalunya (SMC), la temperatura máxima se registró en Vinebre (Tarragona), que alcanzó los 41,6 grados, por encima de los 40,8 que se midieron en la misma localidad el 16 de septiembre de 2000.
En El Masrroig (Tarragona), los termómetros subieron hasta los 40 grados, mientras que en Benissanet (Tarragona), Torroja de Priorat (Tarragona), el pantano de Ribarroja (Tarragona) y Artés (Barcelona) el calor superó los 39 grados.
Por encima de los 38 grados se situaron Aldover (Tarragona), Ascó (Tarragona), El Pont de Vilomara (Barcelona), Els Hostalets de Pierola (Barcelona), Òdena (Barcelona), Castellnou del Bages (Barcelona) y Margalef (Tarragona).
La ola de calor, la primera en septiembre desde 2003, se dará por finalizada mañana cuando se espera que las temperaturas aminoren, aunque continuará el tiempo estival y un calor veraniego.
La dirección general de Protección Civil mantiene hoy activado en nivel de alerta el plan de emergencias Procicat por la ola de calor.
Según el Servicio Meteorológico de Cataluña, se considera ola de calor cuando hay una superación de temperatura máxima diaria de cada municipio establecida por el valor percentil 98 durante tres días consecutivos o más.
El percentil 98 es el valor estadístico que indica que sólo el 2% de días de los meses de verano, la temperatura máxima ha sido superior a este valor.
Este percentil toma un valor diferente en cada municipio en función de las temperaturas máximas que se alcanzan.