La Generalitat de Catalunya tiene previsto impulsar antes del 31 de julio un conjunto de iniciativas legislativas en materia fiscal con el objetivo de iniciar su tramitación parlamentaria para recuperar los impuestos propios derogados por el Tribunal Constitucional.
El Govern quiere así recuperar el impuesto sobre los depósitos en las entidades de crédito y el impuesto sobre la producción de energía de origen nuclear, tal como ha informado en un comunicado, en un claro pulso al Alto Tribunal en un momento en el que el presidente catalán, Carles Puigdemont, ha dejado en manos de la CUP -que aboga por la desobediencia- superar en septiembre una cuestión de confianza.
El TC anuló la ley catalana que regulaba el impuesto sobre los depósitos de las entidades de crédito al considerar que la norma creó un tributo cuyas características son idénticas a uno estatal, lo que contraviene la Constitución, una reflexión similar en la tasa sobre combustible nuclear, pues vio “coincidencias sustanciales” con el impuesto estatal que grava dicho producto.