La Guardia Civil ha detenido hoy en Algeciras (Cádiz) a una pareja formada por un marroquí y una española residentes en Granada que estaban a punto de viajar a Marruecos con su hijo menor y, desde allí, trasladarse previsiblemente a Siria.
La pareja mantenía contactos por internet con personas relacionadas con el Estado Islámico, o Dáesh, que les habrían animado a viajar a Siria para unirse a la causa yihadista, unas comunicaciones que comenzaron a raíz de la reciente inmolación del hermano del detenido en un atentado suicida en Siria.
Fue por tanto el fallecimiento del hermano, según ha informado el Ministerio del Interior, lo que precipitó la partida de la pareja, que, en el momento del arresto, se disponía a viajar a Marruecos en compañía de su hijo menor, sobre el que se han adoptado las oportunas medidas de protección.
Al parecer, los detenidos iban a dejar al menor en Marruecos con algún familiar y desplazarse desde allí a un tercer país, previsiblemente hasta Siria.
Por ello, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha calificado las detenciones de preventivas y ha aclarado que este tipo de arrestos se han intensificado dado el estado actual de alerta 4 antiterrorista.
En el marco de la operación, los agentes han practicado varios registros en viviendas de Granada relacionadas con los detenidos, una de ellas ubicada en la calle Doctor Vaca Castro del barrio de La Chana, que ha sido inspeccionada desde la madrugada y hasta primera hora de esta mañana.
Fuentes de la investigación han detallado a Efe que durante la operación, denominada Sable, se han incautado en el domicilio bellotas con droga, móviles y material informático.
La pareja había ocupado de manera ilegal la vivienda registrada, propiedad de un banco, según han indicado las mismas fuentes.
La investigación de la Guardia Civil que afecta a la pareja gira en torno a “diversas personas que forman parte de una amplia estructura de apoyo al Dáesh”, ha explicado el ministro, quien ha destacado que, desde que se incrementó el estado de alerta, se han producido 120 detenciones.
Esto es, ha opinado, “gracias a un marco jurídico extraordinario” y a “la magnífica colaboración y coordinación que existe entre la Audiencia Nacional, los jueces centrales de instrucción, los fiscales y los servicios encargados de la lucha antiterrorista”.
En la Audiencia Nacional, ha dicho, hay “doscientas investigaciones que afectan a cuatrocientas personas” relacionadas con el yihadismo y que, aunque hay un “riesgo elevado” de atentados, se pone de manifiesto “que se trabaja las 24 horas los 365 días del año para impedir que los terroristas se salgan con la suya”.
Los detenidos pasarán a disposición de este tribunal, concretamente del titular del juzgado central de instrucción 2, Ismael Moreno, en los próximos días.
Con los arrestos de hoy ascienden a 18, al menos, los detenidos por las fuerzas de seguridad españolas por su vinculación con el terrorismo yihadista en lo que va de año.
De estas 18 personas, 17 han sido arrestadas en España y una en Marruecos en colaboración con las fuerzas de seguridad de ese país, en un total de 9 operaciones, según datos del Ministerio del Interior.
La operación más importante registrada este año tuvo lugar el pasado 7 de febrero y culminó con la detención de siete personas en las provincias de Alicante, Valencia y Ceuta, supuestos componentes de una célula que enviaba armas, material militar y dinero a organizaciones terroristas en Irak y Siria, como Jahbat al Nusra y Estado Islámico, disimulado como ayuda humanitaria.
Poco más de dos semanas después, el 23 de febrero, la Policía Nacional, en colaboración con la marroquí, desarticuló igualmente una célula de captación y adoctrinamiento de menores ceutíes para sumarse al Estado Islámico y detuvo a cuatro personas, tres de ellas en la ciudad autónoma y otra en Nador (Marruecos), entre ellas Hamed Abderrahman Ahmed, Hmido, conocido como “el talibán español”.