El análisis del material hallado por la Guardia Civil en el zulo descubierto la semana pasada en un descampado de Ceuta, especialmente un pendrive, confirma que éste pertenecía al Dáesh, posiblemente a una célula antigua que los investigadores piensan que no está operativa en la actualidad.
Fuentes de la lucha antiterrorista han informado a Efe de las conclusiones del análisis de esos documentos, que acredita “cien por cien seguro”, según las fuentes, que se trata de un depósito del autodenominado Estado Islámico.
Los investigadores se inclinan a pensar que se trataría de una estructura antigua, probablemente no operativa.
El hallazgo del zulo, que contenía cuatro armas cortas, dos subfusiles y varias armas blancas, además del citado pendrive y una pequeña bandera con símbolos del Dáesh, se conoció el pasado 8 de abril.
Al principio, los investigadores apuntaron a la delincuencia común como el origen más probable de esas armas, pero la presencia del banderín y la documentación recuperada del dispositivo USB han determinado finalmente su vinculación con el terrorismo yihadista.
El pendrive incluye instrucciones de coordinación internas del grupo o célula relacionado con este depósito como algunas informaciones genéricas sobre posibles objetivos, informa el Ministeiro del Interior.
Sin embargo, esas informaciones sobre estos posibles objetivos, todos ellos dentro del ámbito de Ceuta, no eran actuales y se encontraban en un grado muy primario de elaboración, tratándose además en algunos casos de objetivos relacionados con la posibilidad de satisfacer las necesidades logísticas del grupo.
Interior califica el hallazgo de “salto cualitativo” en relación con la lucha contra el terrorismo yihadista en España, pues es la primera vez que se detecta la creación de estructuras logísticas y armamentísticas clandestinas estables y con vocación de continuidad dentro de esta amenaza.
Ahora, los investigadores tratan de identificar a las personas que pudieran haber participado en las actividades de este grupo o célula, dentro de los entornos próximos al terrorismo yihadista ceutíes, sin que haya ningún elemento que apunte a la existencia de vinculaciones con el territorio peninsular.
No se puede descartar, no obstante, que algunos de ellos ya hubieran sido detenidos en alguna de las operaciones desarrolladas por la Guardia Civil en Ceuta en los últimos años.
Interior recuerda que la ciudad autónoma es un enclave estratégico con una especial sensibilidad desde la óptica del terrorismo yihadista tanto por sus particulares condiciones históricas, geográficas y demográficas como por la existencia de abundantes objetivos civiles y militares de alto interés estratégico en su entorno inmediato.
En la actualidad, el Dáesh mantiene activa una estrategia de comisión de acciones terroristas con empleo de armas y explosivos fuera de su zona de control directo en Siria e Irak, especialmente en aquellos países miembros de la coalición internacional, donde suelen contar con apoyo de redes locales de apoyo logístico.
Desde la elevación al 4 del Nivel de Alerta Antiterrorista (NAA) el pasado 26 de junio, la Guardia Civil ha reforzado todos los dispositivos operativos y líneas de investigación relativas a la amenaza terrorista, especialmente en aquellos lugares de especial significación como es el caso de la Ciudad Autónoma de Ceuta, donde el Servicio de Información de la Guardia Civil ha desarrollado numerosas operaciones policiales contra redes de apoyo al DAESH.