Iñaki Urdangarin siguió trabajando para el Instituto Nóos en 2007 y 2008 aunque “formalmente” había dejado la entidad el año anterior, según ha asegurado hoy su exsocio Diego Torres ante el tribunal de la Audiencia de Palma que juzga el caso Nóos.
Torres ha detallado que el marido de la infanta Cristina siguió “colaborando” en distintos proyectos después de dejar de formar parte del Instituto Nóos.
Urdangarin abandonó el instituto en 2006 ante la recomendación de la casa real de que no contratara con instituciones públicas ni compartiera negocios con Diego Torres.
A preguntas del fiscal Anticorrupción Pedro Horrach, Torres ha explicado que, si bien Urdangarin ya no pertenecía “formalmente” a Nóos en 2007 y 2008, “seguía colaborando en los proyectos que estaban en marcha y en muchas cosas”.
Según el acusado, que desde las 9.15 horas declara ante el tribunal de la Audiencia de Palma, entre esas colaboraciones están el apoyo al Illes Balears Forum y a la cumbre Valencia Summit de 2006, para los cuales “llamó a muchas personas e hizo muchas gestiones para que ponentes muy relevantes pudieran estar en esas fechas”.
También contribuyó en 2007 al proyecto para la candidatura de Valencia a albergar los Juegos Europeo: “Sigue siendo el mayor experto que teníamos en comités olímpicos”, ha dicho Torres al respecto, que ha detallado que realizaba consultas, “hizo algún viaje a Ginebra y tuvo reuniones en este campo”.
El socio de Iñaki Urdangarin en el Instituto Nóos, Diego Torres, ha afirmado hoy en el juicio que el abogado del Rey Juan Carlos, José Manuel Romero, y Hacienda supervisaban periódicamente las actividades de la entidad y les daban su aprobación.
Torres ha asegurado en su declaración como acusado ante el tribunal de la Audiencia de Palma que el secretario de Nóos, Miguel Tejeiro, mantenía encuentros periódicos con Romero, “abogado del jefe del Estado, y le rendía cuentas” sobre lo que hacía la asociación sin ánimo de lucro que dirigía junto a Urdangarin.
“Además, cada año al llegar el mes de junio, el señor Tejeiro (su cuñado y también responsable de la gestión fiscal del Instituto) se reunía con un alto funcionario de Hacienda para que le revisará las declaraciones de impuestos (…), y se lo aprobaba”, ha subrayado.
Según Torres, principal acusado en el juicio junto al cuñado del Rey Felipe, “eso que se ha dicho de que la infanta (Cristina) era el escudo fiscal (del entramado de Nóos) es absolutamente falso”, puesto que la supervisión de la Agencia Tributaria era garantía de legalidad.
El encausado ha hecho esta afirmación cuando daba explicaciones al fiscal del caso, Pedro Horrach, sobre las empresas que, a juicio del acusador público, eran utilizadas por Torres para sacar fuera de España ingresos obtenidos a través del Instituto Nóos.
Torres se enfrenta a peticiones de pena entre 16,5 y 22,5 años de prisión por presuntos delitos de prevaricación, fraude, tráfico de influencias, malversación, contra Hacienda, falsedad, estafa, falsificación y blanqueo de capitales.
Horrach está centrando el inicio de su interrogatorio en la novena jornada del juicio del caso Nóos en las cuentas en el extranjero de las que era titular Torres o empresas gestionadas por él, quien ha atribuido la responsabilidad de la gestión a Miguel Tejeiro y se ha preguntado por qué su cuñado no está en el banquillo de los acusados.