El PP de Madrid ha presentado hoy una denuncia contra la concejal de Cultura en el Ayuntamiento, Celia Mayer, por “colaboración en el enaltecimiento del terrorismo” y “desprotección de menores” en relación con la obra de títeres programada por el Consistorio con motivo de las fiestas de Carnaval.
El portavoz adjunto del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna, ha presentado la denuncia en los Juzgados de Guardia de Plaza de Castilla contra Mayer y ha exigido su destitución.
“Los madrileños no nos merecemos una concejala de Cultura como la señora Mayer y, si la alcaldesa no la inhabilita, esperemos que los tribunales lo hagan”, ha subrayado.
El PP considera que Mayer “no se puede escudar” en que no conocía el contenido de la obra de títeres ya que en la página web de la compañía aparece públicamente todo lo que representaron en el marco de las fiestas de Carnavales y que ya habían escenificado en anteriores ocasiones.
Ha criticado a quienes consideran lo ocurrido algo que se enmarca dentro del derecho a la libertad de expresión. “De libertad de expresión nada. Estos son delitos que deben ser perseguidos como tales”, ha destacado el líder popular.
Sin embargo, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha considerado que el espectáculo infantil “no era para niños” e, incluso, “puede que fuera de mal gusto”, pero que no ve “delito” en su actuación.
En su cuenta de Twitter, Colau ha pedido también la libertad para los dos detenidos y ha criticado que una “derecha vengativa que no soporta la disidencia” siga “recurriendo machaconamente al ‘todo es ETA'”.
“Una torpeza no es un delito. La sátira no es un delito. En una democracia sana, en un Estado de derecho, hay que proteger toda libertad de expresión, hasta la que no nos guste, hasta la que nos moleste”, agrega la alcaldesa, y concluye el mensaje en Twitter escribiendo: “LibertadTitiriteros”.
El líder del PPC en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández Díaz, ha respondido a Colau de quien piensa que “actúa más cual títere de los antisistema que como alcaldesa”.
En un comunicado, ha señalado que la alcaldesa de Barcelona “no puede justificar” a aquellos que “denigran” a las personas y “ensalzan el terrorismo”.
Fernández ha precisado que defiende la libertad de expresión, pero que en ningún caso esto puede ser confundido con un “insistente derecho a insultar, incluso a realizar apología del terrorismo”.
La detención de dos titiriteros en Madrid, acusados de “enaltecimiento del terrorismo” y “desprotección de menores”, ha encendido la polémica sobre los límites de la libertad de expresión y sobre si la actuación de los acusados fue un acto de mal gusto o un delito.
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ordenó ayer prisión provisional sin fianza para los dos titiriteros que actuaron el pasado viernes en un espectáculo programado por el Ayuntamiento con motivo de las fiestas de Carnaval.
El magistrado, que ha adoptado esta decisión a instancias de la Fiscalía, imputa a Raúl García Pérez, de 34 años, y Alfonso Lázaro de la Torre, de 29, un delito de enaltecimiento del terrorismo y un delito cometido con ocasión del ejercicio de derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizadas por la Constitución, del artículo 510 del Código Penal (CP).
En el auto de prisión, el juez explica que los dos arrestados, durante el desarrollo de la obra “La bruja y don Cristóbal” escenificaron numerosas acciones violentas, como el ahorcamiento de un guiñol vestido de juez, el apuñalamiento de un policía, la violación de una monja y su apuñalamiento posterior con un crucifijo.
Además exhibieron una pancarta con la leyenda “Gora Alka-ETA”, “habiendo tenido lugar esos hechos en un acto público, con numerosa concurrencia de personas y asistencia de un público infantil, a quien esencialmente estaba dirigida la representación de los títeres”.