El Consejo Político de la CUP ha iniciado pasadas las 10 horas una reunión en la que debe decidir si los diputados de esta formación apoyan la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat, o por el contrario, la rechazan y con ello precipitan para marzo un adelanto electoral en Cataluña.
La reunión del Consejo Político de la CUP, y de su Grupo de Acción Parlamentaria (GAP), se celebra en el centro cívico Pere Quart de Barcelona y en ella participan 68 personas con derecho a voz y voto.
Estas 68 personas son los 57 miembros del Consejo Político, que representan a las organizaciones territoriales de la CUP, más los 11 portavoces de las formaciones agrupadas bajo el ‘paraguas’ de Crida Constituent con las que concurrió a las elecciones del 27S.
A esta reunión del Consejo Político de la CUP asisten, asimismo, con voz pero sin voto, los 10 diputados en el Parlament y los 15 miembros del secretariado nacional, por lo que en total son 93 personas las que finalmente debaten si esta formación independentista de la izquierda antisistema acepta el acuerdo negociado con Junts pel Sí (JxSí) en los tres últimos meses.
Dicho acuerdo incluye la investidura del presidente de la Generalitat, pero también un plan de choque con medidas sociales y la hoja de ruta soberanista.
El Consejo Político deberá pronunciarse sobre estas cuestiones después de que ayer ya lo hicieran las trece asambleas territoriales de la CUP, tanto a favor como en contra del acuerdo, lo que refleja la profunda división que hay en esta formación antisistema.
Según fuentes de la CUP el “sí” a la investidura de Mas se impuso con rotundidad en la asamblea del Nord-Oriental (comarcas de Girona, principalmente), pero también en la del Maresme, en la de Ponent-Pirineos y en el Vallès Oriental.
Por el contrario, el “no” triunfó en las asambleas de Barcelona, Baix Llobregat y Vallès Occidental, mientras que se produjeron resultados equilibrados en Camp de Tarragona y Terres del Ebre.
La fórmula aprobada por el secretariado nacional para que se pronuncie el Consejo Político implica tener que elegir entre dos alternativas excluyentes: la primera supone rechazar la investidura de Mas emitiendo 5 votos a favor y 5 en contra o bien con la abstención de los 10 diputados de la CUP.
La segunda alternativa supone aprobar la investidura con 2 votos a favor y 8 abstenciones, lo que permitiría reflejar, indica el secretariado, “la apuesta de la CUP por la independencia y un proceso constituyente y popular” pero también “la oposición a la continuidad de las políticas de recortes y privatizaciones”.
Las dos propuestas se votarán por separado y sólo podrá ser aprobada la que obtenga la mayoría absoluta, pero en el supuesto de que ambas logren dicha mayoría en la primera votación, se iniciará otra ronda de votaciones hasta que sólo sea aprobada una.
Entre cada ronda de votaciones se abrirán turnos de debate y se prevén un máximo de tres rondas, finalizadas las cuales y en el supuesto de se produzca una situación de “bloqueo”, el secretariado nacional “buscará una propuesta metodológica para desbloquear”, que tendrá que ser validada por el Consejo Político.