El Gobierno prevé destinar 281,36 millones de euros en la revalorización del 0,25 % de las pensiones en 2016, frente a los 271,83 millones de 2015, según el proyecto de Real Decreto que va a remitir a los agentes sociales.
El ministerio de Empleo y Seguridad Social ha explicado en un comunicado que ésta es una partida adicional que supone “un importante esfuerzo económico compatible con el objetivo de equilibrio presupuestario, como garantía de sostenibilidad”.
El texto, que se remitirá al Consejo de Estado para su dictamen perceptivo, fija el límite máximo de pensiones públicas a partir del 1 de enero de 2016 en 2.567,28 euros mensuales.
El incremento del 0,25 % beneficiará a más de 10 millones de pensiones o prestaciones (frente a los 9,9 millones de 2014) de las que 9.382.000 son pensiones contributivas, 440.000 pensiones no contributivas y 185.000 prestaciones por hijo a cargo con minusvalía.
En concreto, dentro de las pensiones contributivas, el 60 % de las actualizaciones recaen en las de jubilación (5.691.725), seguidas de las de viudedad (2.368.572), incapacidad permanente (940.036), orfandad (342.256) y favor de familiares (39.412)
Este proyecto de Real Decreto, que será aprobado próximamente en el Consejo de Ministros, recoge el aumento que se aplicará a las pensiones derivadas de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales.
También de las pensiones extraordinarias derivadas de actos de terrorismo, de las pensiones reconocidas en aplicación de normas internacionales y de aquellos casos en los que concurren varias pensiones.
Este incremento se establece con el Índice de Revalorización de Pensiones, que garantiza el incremento anual de las pensiones de acuerdo a las posibilidades económicas del Sistema y la evolución de sus parámetros fundamentales.
Tal incremento debe concretarse entre un mínimo del 0,25 % hasta un máximo de la variación anual del IPC más 0,50 puntos porcentuales adicionales, cuando el contexto económico lo permite.