El presidente de la Generalitat y número cuatro de Junts pel Sí, Artur Mas, ha apelado hoy a “llenar urnas con el sí” a la independencia, tras “llenar las calles” en la Diada, porque, si no es así, el 27S “nos pasarán por encima sin contemplaciones”, ha advertido en alusión al Estado.
Mas ha intervenido hoy en un acto en Martorell (Barcelona) junto al número seis de Junts pel Sí por Barcelona, Eduardo Reyes (Súmate), y los vicepresidentes del Parlament y también candidatos Anna Simó (ERC) y Lluís Corominas (CDC).
El presidente catalán ha reiterado las críticas al Gobierno central por no valorar las movilizaciones independentistas del 11 de septiembre de los últimos años y ni siquiera sentarse para negociar una solución: “¿Qué coño de democracia es esta cuando no se hace caso a las urnas?”, ha espetado.
En este contexto, Mas ha pedido mantener la “convicción” y la “determinación” de la manifestación de la última Diada también de cara al 27S, porque “en lugar de llenar calles, ahora hay que llenar urnas y llenarlas de síes” a la independencia.
De esta manera, ha llamado a movilizar el voto independentista para que no quede “corto” el resultado el día 27 de septiembre y ha avisado, en alusión al Estado, de que, si no obtienen mayoría, “nos pasarán por encima sin contemplaciones”, ya que “no se andan con chiquitas”: “Ojo y atención, nos estamos jugando mucho”, ha remachado.
Ante lo que ha calificado “de muro granítico y actitudes monolíticas en Madrid a derecha e izquierda”, el número cuatro de Junts pel Sí ha pedido que se evite dentro de Cataluña la “lucha partidista”, porque cree que sólo sirve para “repartirse las migajas” del poder autonómico.
Reyes, que ha recordado su origen cordobés, ha criticado las inversiones en AVE y carreteras de los diferentes Gobiernos en diferentes partes de España, mientras que en Cataluña “no invierten ni un puto euro”: “Nos están jodiendo -desde el Estado-“, ha remachado.
El presidente de Súmate, organización soberanista de catalanes castellanohablantes con raíces en otras partes de España, ha denunciado que el Estado trata de tener a Cataluña “como un pueblo tonto” al que poder “dominar”.