Si hoy se celebraran elecciones generales, el PP ganaría los comicios y obtendría un 28,2 por ciento de los votos, aumentando hasta los 3,3 puntos su distancia con el PSOE, que sacaría un 24,9 por ciento de los sufragios, mientras que Podemos -15,7- y Ciudadanos -11,1- pierden fuelle.
El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), cuyo trabajo de campo se hizo entre el 1 y el 9 de julio, justo después de la formación de los gobiernos autonómicos y los ayuntamientos, apunta a un fortalecimiento del bipartidismo, ya que tanto PP como PSOE aumentan sus apoyos desde la encuesta de abril.
Resiste el bipartidismo
Conocidos ya los pactos postelectorales, los populares suben 2,6 puntos, y el PSOE seis décimas.
De hecho, la suma del PP y el PSOE alcanza en la encuesta de julio el 53,1 por ciento frente al 49,9 del barómetro del mes de abril, elaborado antes de las elecciones municipales y autonómicas.
Por contra, los llamados partidos emergentes pierden fuerza, en el caso de Podemos por segunda encuesta consecutiva, ya que desde el CIS de enero ha pasado del 23,9 por ciento al 15,7 de julio, si bien ese descenso se suaviza en la última oleada, en la que sólo pierde ocho décimas.
Ciudadanos, que se disparó en el CIS de abril al pasar del 3,1 por ciento al 13,8 retrocede casi tres puntos hasta el 11,1 por ciento.
Voto directo
No obstante, en voto directo -sin la estimación que realiza el CIS- el PSOE es el partido con más apoyos, con el 17,3 por ciento, seguido por el PP, con el 16 por ciento, Podemos con el 12,6 y Ciudadanos con el 7,7 por ciento de los sufragios.
IU y UPyD siguen perdiendo apoyos y, mientras el partido de Andrés Herzog pasa del 1,9 al 1,3 por ciento, el que encabeza Alberto Garzón para las elecciones generales obtendría un 3,7 por ciento de los apoyos, frente al 4,8 del barómetro de abril.
CiU -antes de su disolución- y ERC, partidos que apoyan la independencia de Catalunya, experimentan una ligera subida de una décima cada uno.
De este modo, CiU cosecharía el 3,3 por ciento y ERC el 2,1 por ciento de los sufragios.
Por su parte, el PNV casi duplicaría sus apoyos, al pasar de 0,7 al 1,3 por ciento, mientras que Amaiur crecería del 0,9 de abril al 1,1 por ciento del barómetro de julio.
Compromís-Equo, que ha entrado en el Gobierno de la Comunidad Valenciana y tiene la alcaldía de Valencia, ve cómo aumenta su respaldo del 0,8 al 1,2 por ciento.
Geroa Bai, cuya portavoz, Uxue Barkos, es la nueva presidenta de Navarra, eleva sus apoyos del 0,1 al 0,5 por ciento, mientras que el BNG también crece levemente una décima y obtendría un 0,7 por ciento de los votos.
Coalición Canaria, que conserva el Gobierno de las islas, pasa del 0,5 al 0,4 por ciento, y UPN que no obtenía porcentaje en el último CIS, conseguiría ahora un 0,1 por ciento de los sufragios.
Los líderes suspenden
En cuanto a la valoración de los líderes políticos, como ya es habitual en estas encuestas ninguno aprueba.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, desciende hasta el tercer puesto, con una nota de 3,84 sobre diez, y es desbancado en el segundo por el diputado de Compromís, Joan Baldoví, aunque sigue sacando una ventaja de más de un punto al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que se queda en un 2,61 sobre diez.
No obstante, la exportavoz de Geroa Bai y ahora presidenta de Navarra, Uxue Barkos, sigue siendo la política más valorada, con una puntuación de 4,72 puntos.
Entre los miembros del Gobierno, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría pierde el primer puesto en favor del titular de Exteriores, José Manuel García-Margallo, que se queda en un 3,23.
Paro, principal problema
Como todos los meses, el CIS pregunta a los ciudadanos por sus preocupaciones y su visión sobre la situación política y económica.
El paro sigue siendo el primer problema para el 78,8 por ciento de los ciudadanos, seguido de la corrupción y el fraude, citados por el 43,7 por ciento de los encuestados, casi cuatro puntos menos que en la anterior encuesta.
La situación política es mala para el 36 por ciento y muy mala para el 31,1, en tanto que la situación económica es mala para el 41,2 y regular para el 28,8 por ciento.
A menos de dos meses de las elecciones catalanas, que los partidos independentistas plantean en clave plebiscitaria, el número de partidarios de que el Estado autonómico permanezca como está ha crecido casi seis puntos, del 32,4 por ciento al 38,2.
El sondeo refleja que los partidarios de que en España se reconozcan los estados independientes permanecen en el 9,7 por ciento, el mismo porcentaje que en la encuesta de junio.