El tiroteo que tuvo lugar el martes en la Rambla de Barcelona, en el que dos personas resultaron heridas, podría deberse a un ajuste de cuentas relacionado con el tráfico de drogas, según explicó ayer el conseller de Interior, Jordi Jané.
Un hombre, que está siendo buscado por la policía, disparó con una pistola a otros dos hombres en la calle Pintor Fortuny, junto a la Rambla, e hirió de bala a uno de ellos, mientras que el otro sufrió heridas al cortarse con los cristales al atravesar una puerta en su huida.
Jané, que participó en Lleida en la junta de seguridad de la ciudad, explicó que, aunque los hechos están siendo investigados por los Mossos, todo hace pensar que los hechos no tienen relación alguna con un ataque terrorista. "Trabajamos con la hipótesis de que no se debe a una actuación terrorista o yihadista. Quiero dar tranquilidad en ese sentido", afirmó el titular catalán de Interior. "Parece tratarse -añadió- de un tema de ajuste de cuentas entre personas, aunque todavía no hemos podido interrogar detenidamente a la persona herida de bala.
El conseller agregó que, aunque se dijo que el herido de bala era belga, podría haber un caso de identidad falsa, ya que "probablemente tiene identidad rusa".