El presidente de la Generalitat, Artur Mas, tildó ayer de “ignorante” al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, y de “hooligan” al PPC en la que fue la última sesión de control al Govern del Parlament en la presente legislatura, en un marcado ambiente preelectoral.
En el pleno de la Cámara catalana, Mas respondió con contundencia las acusaciones de mala gestión que le lanzaron desde las bancadas de la oposición.
En esta línea, el presidente catalán calificó de “ignorante” a Albert Rivera para rebatir los datos que el presidente de Ciudadanos, en su último pleno como diputado autonómico, le mostró para criticar su “nefasta gestión” en el Govern.
Rivera le acusó de tener más listas de espera, más paro, más deuda, un incremento del “déficit democrático” y un balance negativo por el cierre de empresas en comparación a cuando llegó a la Generalitat en 2010.
Mas sólo le admitió que había más deuda, por el incremento del déficit -“esto es de primero de básica”, le espetó-, pero en el resto de datos dijo que son todo lo contrario: “Deseo que no tenga responsabilidades muy importantes -en el futuro- por el grado de ignorancia que demuestra”, sentenció.
En el turno de la presidenta del PPC, Alícia Sánchez-Camacho, Mas acusó al Gobierno del PP de no querer negociar un referendo para Cataluña y se preguntó si algún día “escucharán” lo que exprese el pueblo catalán y se “sentarán en la mesa” como “gente civilizada y normal”, en lugar de “seguir haciendo el hooligan como hasta ahora”.
Balance positivo
Ante el pleno, Mas hizo un balance “razonablemente positivo” de su Govern atendiendo, según dijo, las circunstancias que ha vivido Cataluña, el conjunto del España y los países europeos.
Confirmó que disolverá el Parlament a principios de agosto, para convocar las elecciones catalanas del 27 de septiembre, en las que dijo que “dará la cara”.
Por su parte, los grupos de la oposición también cargaron contra el president Artur Mas. El PPC lo calificó como “el peor presidente catalán de la historia”, mientras que el PSC le acusó de “rebajar” y “desprestigiar”la Presidencia de la Generalitat.
“Usted ha tomado una opción que rebaja el papel de la Presidencia de la Generalitat”, sentenció el primer secretario del PSC, que aseguró que esto nunca lo habrían hecho los anteriores presidentes catalanes. “No hay ejemplos en ningún lugar de una cosa así, esto no es hacer las cosas bien, ni es honesto; quien quiere ser presidente da la cara y se pone al frente de su candidatura; usted quiere evitar así rendir cuentas de su gestión”.