La consejera de Derechos Sociales del Gobierno de Aragón, Victoria Broto, ha asegurado que el incumplimiento por no subsanar las deficiencias detectadas en la residencia Santa Fe deberían haber derivado en el inicio de un expediente de cierre.
Deficiencias que no afectaban a la seguridad de los usuarios, según ha señalado Broto en una rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, en el que se ha analizado la tragedia del pasado sábado con la muerte de ocho ancianos de la residencia a consecuencia, supuestamente, del incendio provocado por una de las usuarias.
La consejera ha explicado que la residencia fue abierta en 1997 y, según las visitas de inspección, tenía autorización provisional de apertura. En una nueva inspección en 2006 se le plantearon ciertos requisitos y el 15 de diciembre de 2012 se le retiró el informe favorable condicionado y se incoó expediente sancionador porque no había subsanado las deficiencias higiénico sanitarias y de acondicionamiento.
El Gobierno de Aragón se encuentra ahora en trámite de valoración de los expedientes, pero Broto cree que dicha situación debería haber concluido con el inicio del trámite de cierre de la residencia. De hecho, ha informado de que el expediente lleva parado desde el 19 de mayo de 2014, fecha desde “la que no hay constancia de otra tramitación”.
La consejera también ha negado que hubiera plazas concertadas ya que aunque existe un informe en el que se reconoce la posibilidad de adjudicar hasta ocho, el 25 de febrero de 2015 el servicio de Planificación informó a la Gerencia de que no tenía informe favorable y que por lo tanto “no puede tener ninguna persona en plaza concertada”.
Respecto a los requisitos de personal Broto ha asegurado que sí que lo cumplía, “otra cosa es que ese Decreto deba de modificarse”, puesto que, según ha dicho, desde 1992 “ha cambiado mucho el perfil de las personas que están en las residencias” y ahora “hay muchas no válidas”.
Ahora, la consejera ha anunciado su intención de analizar cómo están todas las residencias en la Comunidad dado que en la pasada legislatura “no se cumplió el plan de inspección”, pues solo se dio cuenta en las Cortes del estado de las públicas.
Broto, quien ha insistido en la prudencia porque hay un proceso de investigación abierto, ha advertido de que su intención no es la de “ajusticiar a nadie si no a poner todas las medidas posibles para que la investigación se haga adecuadamente”.
“Lo que nos preocupa es gestionar bien este procedimiento; las consecuencias que podamos sacar respecto a nuestra gestión”, ha subrayado.
La consejera ha informado de que a consecuencia del incendio dos personas permanecen ingresadas, una de ellas en la UCI, de la que la familia no quiere facilitar información, y otra en la planta de Psiquiatría, mientras que otras siete se han reubicado en la residencia de Alfamén (Zaragoza).
Según Broto “lo fundamental” fue atender a las personas desde el punto de vista médico, psicológico y proceder al realojamiento de las personas.
Por su parte, el consejero de Presidencia, Vicente Guillén, ha expresado su deseo de que “ojalá no vuelva a pasar nunca más”, para lo que tendrán que tomar alguna medida, repasar el estado de las residencias y “ver si alguna tiene algún grado de deficiencia corregirlo”.