La Policía Nacional ha desmantelado una organización dedicada al tráfico de hachís a gran escala que usaba viviendas alquiladas en Alhaurín de la Torre (Málaga) para su almacenaje y distribución, actuación en la que han sido detenidas cinco personas e intervenidos 4.600 kilos de esta droga.
La red disponía de vehículos adaptados en talleres mecánicos para cargar gran cantidad de droga y disimular esa sobrecarga en el exterior, según ha informado hoy la Policía en un comunicado.
Durante la investigación, que se inició el pasado septiembre, los agentes comprobaron que cada integrante de la organización tenía un rol definido, desde adquirir la sustancia estupefaciente, a trasladarla desde Bolonia, en Tarifa (Cádiz) por carretera hasta Málaga, u ocultarla en las viviendas alquiladas.
En un dispositivo establecido durante un transporte de droga, la Policía detuvo a tres personas, que fueron interceptadas en varios vehículos, uno de ellos cargado con 1.120 kilos de hachís.
Paralelamente, se llevaron a cabo dos registros, uno en una nave de Cádiz, en el que se hallaron 600 kilos de hachís y se recuperaron cuatro vehículos sustraídos, y otro en el domicilio del jefe de la red en Torremolinos (Málaga), en el que los agentes se incautaron de 70.000 euros en efectivo.
Tras las primeras detenciones, los investigadores localizaron dos domicilios que habían alquilado dos de los arrestados en Alhaurín de la Torre, y en uno de ellos hallaron 2.920 kilos de hachís repartidos por distintas estancias de la vivienda, así como en el maletero de un vehículo aparcado en el garaje del inmueble.