El 80% de trabajadores en activo con contrato a tiempo parcial, el 24,5% de desempleados, 5 millones de pensionistas con una pensión de miseria, 8.500.000 personas en situación de exclusión social, 40.000 jóvenes estudiantes que emigran cada año, 3.270.000 autónomos con deberes y sin derechos, 1.840.000 dependientes de la ley de la dependencia, las más de 80.000 víctimas de violencia de género, sin residencias públicas, con una asistencia sanitaria indecente.
Mientras tanto los que deberían atender estas necesidades desde su compromiso político están inmersos en estrategias de desgaste, de confusión, de objetivos espurios, de engañar al adversario, de forzar situaciones sin resolución clara, de estrategas sin estrategia a medio y largo plazo, de dejar al pueblo desprotegido y desamparado, de aplicar lo de “a río revuelto, ganancia de pescadores”.
Los parlamentarios con sus diferentes grupos políticos, y sus líderes a la cabeza, acechando el gallinero. Ahora el zorro y la zorra miran el gallinero con el deseo de que se abran las puertas del hemiciclo para seguir el camino emprendido por esta derecha reaccionaria y neofascista de intoxicar al pueblo contra los que tienen posibilidad de gobernar. Vox llama traidor a Pedro Sánchez porque intenta formar gobierno. Esos que justifican el asesinato de más de 50.000 españoles en la postguerra española claman al cielo porque pactan con el PNV. Esos 52 fascistas que ocupan escaños en el parlamento español se atreven a insultar a la inteligencia (ver la película “Mientras dure la guerra”).
Ahora los sindicatos avisan: si no nos dejáis salir en la foto nos movilizaremos. Pobre argumento cuando de lo que se trata es de cambiar la cerradura del gallinero, proteger a las gallinas y dejar al zorro y la zorra en la UVI.
Es curioso observar lo que está pasando. Esa percepción de los tres jinetes de la Apocalipsis de “si no estás conmigo, eres un traidor de España”. Ese olvido de la memoria histórica, que a estas altura de los 42 años de pseudodemocracia ya es imposible digerir. Esos hijos de “Paco” que con esa altanería nos revuelven las tripas a la mayoría de españoles y catalanes. Esos que han llegado al gallinero por la ignorancia de la España olvidada y de la mano del PP y de Ciudadanos.
Esos generales que, ya retirados de la vida militar activa y haber estado cobrando más que el ministro de Defensa, y con el carnet de Vox en el bolsillo, lanzan proclamas de rebelión contra el orden constitucional español, sin ningún respeto, porque su subconsciente todavía está en el 18 de julio de 1936 en “el alzamiento nacional” para salvar su patria de las “hordas masónicas y comunistas” que por el simple hecho de pensar diferente a ellos ya no son patriotas, y menos españoles. Mientras las proclamas del general fascista Gonzalo Queipo de Llano, desde Radio Sevilla, llamando a la legión y la guardia mora a demostrar lo “machos” que eran violando a mujeres y decapitando a hombres en las zonas ocupadas por el ejército fascista, eran actos en defensa de la patria.
Esa España sigue viva y dentro del gallinero. Y está ahí porque 3.640.000 votos de Vox le han dado los 52 escaños, y además 5.200.000 votos del PP + 1.637.000 votos de Ciudadanos los han introducido en las instituciones democráticas.
En ese mar de “mierda” las fuerzas democráticas deben sobrevivir, y sobre todo deben poder desarrollar un programa político de contenido social, mientras los zorros atacan el gallinero por la espalda, con “nocturnidad y alevosía”.
Y el pueblo de la España sin memoria, mientras tanto, ahí está, sentado en el sillón enviando mensajes de whatsapp, de contenido absurdo, hortera, y la mayoría de veces cargado de mensajes que para nada ayudan a la convivencia.
Qué desastre, ya lo dijo mi tocayo Antonio Machado:
Ya hay un español que quiere
vivir y a vivir empieza,
entre una España que muere
y otra España que bosteza.
Españolito que vienes
al mundo te guarde Dios.
una de las dos Españas
ha de helarte el corazón.