En 1955, tres habitantes de la localidad de Arles de Tec, en la comarca del Vallespir (Catalunya Nord o francesa), inspirados por el poema "Canigó" de Jacint Verdaguer, tuvieron la idea de encender en la cumbre de esta montaña una antorcha, y repartirla por todos los territorios de lengua catalana, para que con ella se encendieran las hogueras de Sant Joan.
Nació así la tradición de la Flama del Canigó, con la que, la noche del 23 de junio, actualmente se encienden unas tres mil hogueras en todos los Països Catalans.
Mensaje de Forcadell
La Flama del Canigó visita Terrassa desde hace muchos años, y ya constituye una arraigada tradición de las horas previas a la celebración de la verbena. Hasta 2016 su recepción tenía lugar en la Plaça Vella, y al siguiente Òmnium Cultural y la entidad la Xemeneia la trasladaron al atrio del Ayuntamiento, donde se la espera mañana, a las seis de la tarde, traída por el Club Ciclista de Castellbisbal.
Allí será leída el mensaje de la Flama del Canigó, este año escrito por la ex presidente del Parlament, Carme Forcadell, desde la prisión de Alcalá-Meco. Después, La Pàjara trasladará la Flama al Pla de la Font de l’Apotecari, donde a partir de las siete se desarrollarán talleres infantiles y, a las ocho, una cena popular. A las 10.30 de la noche está previsto el encendido de la hoguera, y el inicio del baile con el grupo Betzuca, Miquel del Roig y dj’s.