El superordenador MareNostrum 5 del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) incorporará una plataforma experimental dedicada a desarrollar nuevas tecnologías "made in Europe" para la futura generación de superordenadores con el fin de lograr soberanía e independencia frente EEUU y China. Así lo anunció ayer en Barcelona el director del BSC, Mateo Valero, en una rueda de prensa en la que también participó el director general de Redes de Comunicación, Contenido y Tecnologías de la Comisión Europea, Roberto Viola.
También asistieron al acto la secretaria de Estado de Universidades, Investigación y Desarrollo del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, Ángeles María Heras; la consellera de Empresa, Maria Àngels Chacón, y el rector de la UPC, Francesc Torres. El próximo superordenador, que será uno de los más potentes de Europa y del mundo, además de ofrecer servicios de supercomputación de primer nivel para investigadores de toda Europa, contribuirá con su investigación a que las futuras generaciones de superordenadores puedan incorporar tecnologías íntegramente desarrolladas en la UE. "Europa necesita desarrollar hardware, si queremos ser soberanos y tecnológicamente independientes necesitamos construir procesadores", remarcó Valero, que citó el reciente conflicto entre Huawei y Estados Unidos para resaltar la necesidad de que Europa desarrolle tecnología propia. El director del BSC aseguró que con el MareNostrum 5 "somos el Messi de la supercomputación" y resaltó que se tratará de un superordenador "heterogéneo adaptado a los nuevos requerimientos de los usuarios, con especial énfasis en la inteligencia artificial". Por su parte, Viola remarcó el "esfuerzo conjunto" y el trabajo en equipo de todos los países y de la iniciativa EuroHPC de la Comisión Europea, la que financia parte del MareNostrum5 y que impulsa la supercomputación para competir con las potencias mundiales.
Alta calidad
"Estos sistemas de alto rendimiento proporcionarán a Europa las capacidades de alta calidad que necesita para seguir al mismo ritmo que sus competidores a nivel global", explicó el dirigente de la CE. En su intervención, la secretaría de Estado hizo hincapié en el carácter europeo del BSC y en la necesidad de reforzar la Unión Europea como un actor global potente: "Si no somos una Europa fuerte, entre Estados Unidos y China lo tenemos complicado". El MareNostrum5 tendrá un coste de 223 millones de euros, contando la adquisición, la instalación y el mantenimiento durante 5 años.