Desde el jueves y hasta el lunes, Terrassa acoge una nueva cita con la Romería del Rocío, organizada por la Federación de Entidades Andaluzas en Catalunya (Fecac) y las hermandades rocieras. La romería tiene lugar en Can Petit, junto al polígono industrial. Este domingo, a las diez de la mañana, se ha celebrado uno de los actos centrales, la misa rociera, oficiada por el obispo Josep Àngel Saiz Meneses, y presidida por las autoridades, entre ellas el alcalde en funciones Alfredo Vega.
Durante la homilía, el obispo ha hecho un llamamiento a la oración, a la convivencia y a superar las actitudes egoístas que no dejan avanzar. “Si llevamos treinta años haciendo romería no podemos seguir con las mismas manías. Hay que madurar personal y espiritualmente, y hay que poner a Dios en el centro de nuestras vidas antes que el móvil”, ha manifestado Saiz Meneses en un lenguaje sencillo y próximo”.
La misa rociera ha reunido a centenares de personas, muchas de ellas ataviadas con los vestidos tradicionales andaluces. “La romería es una bendita locura”. Con estas palabras resumía Rosa, de la entidad Pastorcillo Divino, de L’Hospitalet de Llobregat, su sentimiento hacia el encuentro en honor a la virgen del Rocío. Pastorcillo Divino es una de las cien hermandades y asociaciones que han instalado carpa en Can Petit y que participan en la fiesta.
La romería aguarda dos actos importantes. El primero es el Rosario de la Aurora, hoy, a las doce de la noche, donde todos los fieles acuden portando antorchas y están acompañados por el canto de la Hermandad Nuestra Señora del Rocío de Pineda de Mar. Y el segundo será el lunes, a las ocho de la mañana, cuando se celebrará la procesión de la Virgen del Rocío por todo el recinto.
