El gobierno de la Generalitat de Catalunya aprobó el martes declarar el Vapor Aymerich, Amat i Jover de Terrassa, sede del Museu de la Ciència i de la Tècnica de Catalunya, Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN), en la categoría de Monumento Histórico. La decisión se hará efectiva y de pleno derecho con su publicación en el Diari Oficial esta misma semana.
El mNACTEC había solicitado hace tiempo esta declaración, y evidentemente se muestra satisfecho por la decisión de la Generalitat de otorgarle la categoría superior de protección, "que reconoce el edificio del Vapor como un elemento del patrimonio cultural catalán", señalaba ayer a este diario Jaume Perarnau, director del museo.
Ventajas y algún inconveniente
El hecho de ser un BCIN tiene "ventajas, y algún inconveniente", añade Perarnau. Entre las primeras, su ubicación "en el mapa de los elementos de patrimonio más importantes de Catalunya. Otorgándole así también la categoría específica de uno de los edificios más destacados del patrimonio industrial no solo de Catalunya sino de Europa".
Ello hará que puedan llegar al Vapor Aymerich y por ende al mNACTEC "las inversiones priorizadas que se decidan para esta categoría".
El inconveniente, "que para mí no es tal", reside en la obligación de que cualquier actuación arquitectónica en el edificio ha de ser aprobada previamente por la comisión de patrimonio de la Generalitat. Un BCIN "tiene un gran nivel de protección, por lo que no se le puede realizar libremente ninguna intervención. sin esa autorización previa. Pienso que ello constituye una garantía de que cualquier intervención en el edificio tendrá asegurada un rigor y una gran calidad".
El Vapor Aymerich es la obra más emblemática del sector textil lanero en Catalunya. Construido entre 1907 y 1908, según el proyecto de Lluís Muncunill, es un edificio funcional (fue una fábrica en activo hasta la década de 1970) y a la vez de gran belleza, en el que destaca el uso de materiales y técnicas tradicionales con otros de nuevos, como las columnas de hierro colado.
