Estamp, una de las veinticuatro empresas que ayer participaron en la primera Fira d’Ocupació organizada por la Cambra de Terrassa, quiere fomentar las vocaciones industriales entre los jóvenes, especialmente entre las mujeres, porque aún son muy "escasas" las que optan por este camino laboral. "Todavía son pocas las estudian grados, por ejemplo, de mecanizados, mecatrónica o robótica. Con las ingenierías es diferente; cada vez hay más mujeres, pero cuando la oferta laboral es para el taller o la fábrica es todo más complicado". Es Caterina Merchán, representante de Estamp (del sector auxiliar del automóvil) en este nuevo salón, que la empresa aprovechó para conocer, cara a cara, los perfiles profesionales de los jóvenes menores de 30 años que ayer acudieron al Museu de la Ciencia i la Tècnica.
La feria se caracteriza por su "proximidad". Las compañías que ayer instalaron su "stand" en el Museu proceden de la demarcación de la Cambra. Desde grandes superficies comerciales, como Bricomart, Lild o Decathlon, a industrias, como el caso de Estamp, Circontrol, Dermofarm, Indukern, Germans Boada o Ficosa, entre otras, pasando por empresas de servicios como Iman, Catalana Occident o Mafre, o de hostelería, en el caso del Hotel Don Cándido o el restaurante Première. Es decir una oferta rica procedente de sectores diversos. Todos los visitantes (muchos llegados en grupos escolares pero también a título individual) recibieron una guía de las empresas participantes y sus ofertas laborales. "Buscamos perfiles variados con conocimientos en electricidad y electrónica; también valoramos mucho la actitud. Queremos personas que valoran el trabajo y que están motivadas por los beneficios de la sostenibilidad y por mejorar el planeta", comentó Jordi Huguet, representante de Circontrol, empresa radicada en Viladecavalls y centrada en el diseño y fabricación de cargadores y soluciones inteligentes para la carga de vehículos eléctricos. "Hemos hecho contactos interesantes; es posible que llamemos a alguno", añade Huguet, que valoró que la feria ofrece la oportunidad de conocer en persona a los jóvenes que están en búsqueda de empleo. "Así puedes hacerte una idea más aproximada de cómo es la persona", comenta.
Empezar a trabajar
Uno de los muchos estudiantes que pasaron ayer por la feria fue Judith Camps, de la Fundación Main, donde esta joven de 18 estudia hostelería. Le interesó especialmente el "stand" del restaurante Première. "He podido dejar el currículum y eso ya es mucho", comentó. Su compañera, Marina Díez, de 16 años, tiene muy claro que quiere empezar a trabajar cuando acaba su formación. "He entregado bastante currículums; a ver si sale alguna cosa. Está bien poder hablar personalmente con los representantes de las empresas", aseguró.
Ana Besteiro, jefa de recursos humanos de los laboratorios Dermofarm, situados en Rubí, explicó que la empresa participó en la feria "con la idea de crear una base de datos de cara a posibilidades de futuro. Queremos atraer el talento joven del Vallès, convertirnos en un referente". Esta empresa, centrada en la cosmética para el entorno farmacéutico, busca "perfiles muy específicos, que no son fáciles de encontrar". Básicamente, con formación (grado medio o superior) enfocada a la industria. Beatriz Nicolás, de Germans Boada, también de Rubí, comentó que la empresa está interesada en "conocer los perfiles profesionales de los jóvenes que llegan de la Garantía Juvenil y ver cómo podemos colaborar para que tengan su primera experiencia laboral". Para Catalana Occident esta Feria d’Ocupació supuso el debut en encuentros laborales de este tipo. Esta compañía de seguros busca jóvenes licenciados y les ofrece formación y una carrera profesional. "No exigimos experiencia a nivel de sector, si no se trata de puestos técnicos o seniors", comentó Patricia Tejero